☤✠ FIVE NIGHTS AT PSYCHO HORROR ✠☤ NOCHE 5 [FINAL_2/2]

Personajes: SHINee

Guardia nocturno: Onew

Animatrónicos: Key - Jonghyun - Taemin - Minho

Género: Terror/ Suspense

EEL: TP

""INSPIRADO EN EL FAMOSO JUEGO DE MIEDO FIVE NIGHTS AT FREDDY'S""

Resumen: En uno de los hospitales más grandes de Seúl, han añadido tecnología punta de última generación, no solo para cuidar a los internos u operarlos, sino para hacer su estancia más grata. Recientemente los pacientes pueden disfrutar de la compañía de cuatro animatrónicos con apariencia de hermosos jóvenes que pueden mantener conversaciones y llevar a cabo diversas actividades como leer a los niños, inflar globos, caminar por sí mismos y alimentar a los pacientes. 

Al ser tecnología tan cara y delicada, es contratado un joven guardia para que se ocupe de vigilarlos durante la noche, cuando son desconectados, pero desde el primer momento se da cuenta de que algo no parece ir bien. Las cámaras de vigilancia fallan y los animatrónicos cambian de sitio de forma inexplicable.

Tras aquellas palabras por parte del animatrónico, Onew supo inmediatamente que ... o esperaba que fuese él quien ejecutara a los policías o que le cubría mientras él mismo los mataba.
Sin embargo,antes de llegar a hacer nada, ni a decidirse en contestar un sí o un no, escuchó pasos muy pesados y giró la cabeza viendo venir por el pasillo unos tres pares de luces brillantes... Sabía quienes eran, los otros animatrónicos habían despertado y venían para ir con ellos a... ¿pelear?¿Cómo calificar lo que tenían que hacer ahora? Los vio pasar junto a ellos como rayos, como toros que sabían cuál era el objetivo a embestir y pronto los gritos de los policías hicieron acto de presencia. Se vio jalado por la mano de Taemin y arrastrado a la fuerza escaleras arriba mientras veía volar sangre y tripas de aquellos dos hombres que habían tenido la mala suerte de interponerse en el camino de los robots, posicionándose del lado equivocado de la balanza. Escuchó disparos, sin duda estaban tratando de defenderse de los animatrónicos pero... ¿Cuál era el motivo por el que le necesitaban en realidad? Cuando los gritos de angustia dieron paso al peor de los silencios comenzó a entrar en pánico... ¿Qué les esperaba en la octava planta?¿Qué había allí que precisaban de él y de una simple pistola?¿Más de aquellos dardos que los congelaban y los mantenían a raya? 
Revisó su reloj... Hubiera jurado que habían pasado horas y horas y sin embargo, aquella noche, daba la sensación de que el tiempo no lograba avanzar de manera inexorable, no... Ahora el tiempo se había congelado y no eran más que la una y media de la madrugada... Escuchó que quizás uno, pero sólo uno de los otros animatrónicos iba tras ellos... ¿el motivo? Podía escuchar a hombres gritando desde pisos inferiores, sus voces hacían eco en todo el edificio y lo más seguro, era que el Nº1 y el Nº4, se hubieran quedado a cubrir las escaleras para evitar que los policias, mercenarios o quienes fueran, llegaran hasta él y Taemin... Entonces, por pura lógica ante aquel pensamiento, quien iba tras ellos era el animatrónico Key... ¿o no? Antes de alcanzar la puerta que daba al octavo piso,Taemin giró a verle con una expresión tan humana, que le hizo temblar... Parecía a punto de echarse a llorar:


- ¿Qué hay al otro lado de esa puerta...? -susurró Onew aterrado.
- El pasillo que nos separa del Director... Necesitamos de tu ayuda...
- ¿Qué hay ahí que pueda deteneros a vosotros? -dijo asustado.
- La llave... La puerta final se abre con una llave y la tienes tú.
- ¿Yo? ¿¡Acaso ves que lleve un...!? ...


¿A qué clase de llave se refería en realidad? ¿Acaso era una puerta que se abría usando sangre humana? No...Aquello sonaba demasiado a una película de ciencia ficción pero... ¿No era acaso lo que estaba viviendo, completa y absolutamente una película de ciencia ficción? ¿Qué llave era entonces? En silencio mantuvo la analítica mirada de aquel animatrónico mientras intentaba buscar por todo el uniforme esa llave que le estaba pidiendo sin ser capaz de encontrar nada... ¿No se habría equivocado?


- Taemin, yo no tengo ninguna llave...
- La tienes... No tengas miedo... Yo iré delante, te protegeré...
- ¿De qué vas a protegerme? ¿Qué hay detrás de esa puerta?
- ¿Haber..? No hay nada... Solo un largo pasillo negro... -dijo con voz dulce, como si calmara así a un niño pequeño y le sonrió - No va a pasar nada...

Extrañamente, aquello le hacía pensar que sí que iba a pasar algo... Entonces escucharon un golpe seco que retumbó en todo el hueco de la escalera e hizo que el corazón de Onew se estremeciera a causa del miedo. Segundos después, todas las luces se apagaron y escuchó a lo lejos el ruido de los muelles hidráulicos de los otros animatrónicos junto con las voces de algunos policías, quizás hubieran más de los que había calculado esperando fuera o escondidos en alguna parte a la espera de ver si era o no cierto que los animatrónicos se movían de noche.
Sin que Taemin le soltara la mano, escuchó cómo el joven animatrónico abría la puerta que daba a la planta número ocho. Tal y como había dicho, cuanto los recibió fue una inmensa oscuridad, una negrura agresiva y astringente, silenciosa y aterradora. No podía ver siquiera su propia nariz debido a que todas las ventanas parecían estar tapiadas. Lo único que podía sentir que estaba allí con él era Taemin, y no porque llegara a verlo, sino porque sus manos seguían fuertemente sujetas la una de la otra... Por unos segundos se preguntó si... ¿De haber sido aquel robot, un humano, habría estado temblando como temblaba él? Era complicado saberlo... Alzó la cabeza pensando que sólo era un largo pasillo negro y que sin duda el animatrónico sabía por dónde estaba yendo o al menos pensar que así era, le relajaba lo suficiente como para no entrar en pánico. Sin embargo, llegó un momento en el que la herida de su pierna comenzó a dolerle, inclusive a pesarle y se percató de que también el avance del robot era mucho más lento... ¿Porqué? Sin necesidad de usar la vista, se percató de algo que en una situación así y con el miedo en el cuerpo, hubiera sido más sencillo no percatarse. El animatrónico arrastraba los pies, como un ser humano cuando estaba cansado pero... No era eso lo que estaba sucediendo y lo supo porque a él mismo, la pierna herida se le iba hacia el suelo... ¡EL SUELO! Tenía la sensación de que ambos estaban caminando sobre un imán gigante que buscaba anclarlos al suelo y convertirlos en una diana de tamaño humano y que al encenderse las luces, al menos una veintena de hombres jugaría con ellos al "FUEGO A DISCRECIÓN" . Pero era complicado que sucediera... De haber hombres armados allí,los escucharía respirar o habrían disparado de todos modos, podrían tener gafas de visión nocturna o en otro caso, Taemin los habría avistado... ¿Qué sentido tenía entonces el suelo magnético? Hubo un momento en el que pudo sentir como la atracción hacia el suelo se hacía más potente y él acababa de rodillas, al menos con la pierna herida hincada en el suelo y pudo sentir que del mismo modo, su compañero acabó en el suelo, incapaz de moverse a causa de la fuerza de aquel imán. Entonces sus ojos rojos se giraron para verle y le pidió por favor que siguiera adelante. Nada había allí que pudiera hacerle daño siempre y cuando estuviera atento al ruido. Si escuchaba algo, por poco que fuera, tenía que detenerse hasta que cesara el ruido. Solo tenía que avanzar hasta dar con una puerta e introducir la llave. Aún no tenía ni idea de a qué llave se refería pero no dudó en asentir a lo que le indicó el animatrónico. Rozó levemente el cuerpo de Taemin mientras se movía para adelantarlo y poniendo las manos en el suelo, buscó una guía, la junta entre las baldosas, para poder así situarse y tratar de forma invisible un camino que lo llevara siempre en línea recta. De modo que sumido en aquella oscuridad y con el "consuelo" de saber que Tae quedaba a su espalda, comenzó a gatear, pasando una mano por el suelo, siguiendo con ella la junta vertical que debía, o eso esperaba, llevarle hasta el otro lado del pasillo. Quizás aquel suelo imantado no era el verdadero peligro, sino lo que sucedería si las luces se encendían y ellos dos estaban allí atrapados en medio de todas las líneas de tiro. Una vez más se preguntó ¿por qué estoy haciendo ésto? "Podría haberme ido a casa, nadie lo sabría, me hubiera despedido el Director, pero no habría tenido que pasar por todo éste horror que estoy pasando... Es...es como una pesadilla..." 

Hablarse a sí mismo lo mantenía distraído, pues en la oscuridad, los ojos se esmeran en buscar algo, el cerebro no quiere estar sin ver nada, ni sin escuchar nada. Cada poco se detenía creyendo haber escuchado que algo se movía delante de él hasta que en un momento determinado, realmente se percató de que algo se estaba moviendo, podía escuchar unos pasos que parecían deslizarse sobre el suelo y se detuvo en seco. El que tuviera los ojos muy abiertos, no hizo que pudiera ver nada, pero sí que sintió que algo pasaba a su lado dejando tras de sí una pequeña corriente, debido al movimiento que generaba al moverse... Allí había algo...Algo más que él y Taemin... Algo que estaba seguro que como el animatrónico, no era un ser real pero que por algún motivo de su composición, era capaz de resistir el magnetismo del suelo... Quizás estuviera hecho del mismo polo magnético del suelo y por ello sucedía que su oído captaba que se estaba deslizando en vez de andar, porque era repelido... Por eso el animatrónico Nº3 le había dicho que iba protegerlo... A protegerlo de aquello...De aquel otro robot, animatrónico, monstruo o lo que coño fuera que en aquel momento estaba allí con ellos, pasando a su alrededor. Si no les había atacado, quizás significaba que no tenía visión nocturna o que simplemente no era un dispositivo tan avanzado como los otros 4... Quizás por eso Tae le había dicho que si escuchaba ruido se detuviera y quedara muy quieto, porque ese otro droide o lo que fuera, también se guiaba por el oído...
En el momento en el que lo dejaba de escuchar, sin haber perdido la guía del suelo, volvía a avanzar, lo cierto es que su corazón iba muy deprisa, podía sentir el frío sudor del miedo cayendo por su cara, incluso las manos las sentía húmedas... De nuevo aquel sonido acercándose. Se volvió  a quedar muy quieto sin querer perder la guía de la junta del suelo y por un momento, sus ojos vieron que algo pasaban flotando muy cerca de él, algo que no le había llegado a rozar por muy pocos centímetros... Entonces escuchó una voz:


- Alguien está arrastrándose por mi galería.



Pudo sentir como se le atragantaba el alma. Tenía el corazón en aquel momento pujando por salir por su boca y abandonar su cuerpo a su suerte para dejarlo morir allí... Si no se había orinado ya encima a causa del terror que aquella voz metálica le hizo sentir por el cuerpo, era quizás porque su cerebro estaba tan saturado que ni siquiera pudo dar la orden de que lo hiciera... Sabía hablar... Aquel era sin lugar a dudas el animatrónico Nº5 y por algún motivo, estaba en contra de todos los demás y parecía ser algo así como el defensor del Director. Pero... Tenía sentido. Aunque de día era el Nº1, Jonghyun, quien trabajaba en aquella planta, era evidente que habiendo personas, tantas como pacientes, doctores, enfermeras y demás, circulando en las horas del sol, era comprensible que entonces no se activara el suelo imantado... De noche, fuera lo que fuera, era territorio de aquel quinto robot al que no había visto jamás la cara y del que en realidad pensó que no vería nunca, pues había creído que simplemente se había roto y lo habían devuelto a la fábrica de robots... Craso y evidente error, estaba allí,caminando,flotando o lo que coño fuera que hacía, estaba vivo y si tenían que ir a oscuras, y personalmente él, arrastrándose por el suelo y teniendo cuidado con el ruido... No sabía porqué, quizás hubiera pasado ya mucho tiempo y comenzaba a amanecer y por ello, veía con más claridad... Antes de volver a avanzar, se fijó en aquel endoesqueleto lleno de cables y extraños mecanismos, que caminaba de un lado a otro, más bien que flotaba sobre el suelo, repelido por el imán del piso. Mientras volvía a hablar:


- O quizás no...

¿Por qué Taemin no decía nada ? ¿Por qué no trataba de interactuar con el animatrónico Nº5 y convencerlo de que está del lado equivocado? Quizás, a diferencia de los demás, tuviera algún virus que lo volvía malvado o que lo hacía inmune a los diálogos de los demás... ¿Activar la cerradura lo desactivaría a él ? Continuó avanzando cuando escuchó que se alejaba el sonido de sus paso y finalmente, su mano, que iba lo justo por delante de su cuerpo, tocó la puerta... O al menos esperaba que fuera la puerta. Movió la mano al rededor y en cuanto encontró el pomo sintió ganas de gritar y llamar a Taemin y de hecho, se le escapó un grito:


- ¡¡TAE, LA HE ENCONTRADO!!


Un ruido de algo que se frenaba, le hizo agacharse y apartarse la puerta, pegándose a la pared y viendo como una sombra se abalanzaba contra la puerta y la golpeaba antes de que todo quedara en silencio. Verdaderamente parecía que aquel animatrónico era incapaz de adivinar dónde se encontraba porque no podía verlo y si se quedaba quieto y callado, aún menos. Ahora veía con más nitidez aquella figura.. No era nada, ni siquiera parecía humano más que por el hecho de estar sobre dos piernas y tener dos extremidades semejantes a brazos que lucían demasiado largos... Quizás es que lo habían destrozado... ¿Y si era consciente como los demás y estaba allí sabiendo que estaba del lado equivocado? Quizás estuviera lleno de rabia y dolor, pero del mismo modo podía resultar que no lo estaba y simplemente, aquel, el Nº5, era un simple robot sin consciencia ninguna... Aquello resultaba muy difícil de creer , ya que si cuatro de ellos habían desarrollado una mente propia capaz de razonar, por pura lógica y descarte aquel también... Pero podía haber sido intervenido de alguna manera... Más bien, por lo poco que podía ver de su silueta, sí que le debía de haber sucedido algo grave. 
Entonces escuchó la voz de Taemin diciéndole que se apresurara con la llave y aquel quinto animatrónico no tardó en ponerse en marcha e ir en busca de Taemin, quien sin duda lo tendría más difícil ya que no se podía mover del sitio a causa del suelo imantado. 
Fue entonces cuando Onew asintió como si supiera que el animatrónico estaba mirando hacia él y buscó con la diestra la cerradura de la puerta para tratar de identificar al menos la forma de la llave... Rozó con los dedos una forma cuadrada justo bajo el pomo y en medio de éste, un pequeño orificio de unos escasos milímetros de grosor. La llave debía ir allí encajada y fuera lo que fuera, tenía una forma redonda perfecta. Recordó entonces que Tae le había dicho que él llevaba la llave encima y comenzó a tocarse todo el uniforme en busca de esa supuesta llave. Las hombreras, los brazos hasta el cierre de sus mangas largas, la zona en la que llevaba la placa de guardia nocturno, los bolsillos de los pantalones, las costuras, los zapatos y sus cordones... Nada parecía fuera de sitio ni nada parecía encajar con aquella forma y sin embargo, estaba seguro de que le resultaba terriblemente familiar. Al escuchar un quejido por parte de Taemin tras un ruido sordo, se desesperó y por muy poco no se rasgó la ropa al tirar de ella en busca de fuera lo que fuese que debía de estar buscando hasta que... Cuando volvía a tocarse el pantalón se percató de algo que había entre ello y la camisa... El cinturón... ¿La llave era un cinturón? Rozó el contorno cuadrado y no lo dudó un solo segundo antes de comenzar a desabrochárselo apuradamente, pero se vio en la necesidad de quedarse quieto al escuchar ruido... Volvía a sonar aquella especie de onda de radio distorsionada ¿Taemin hablaba con el otro animatrónico o eran los demás? Si eran unos u otros, no lo podía saber porque a él todo aquel ruido le sonaba del mismo modo... Indicaba aquello que el Nº5 debía de estar distraído. Se quitó el cinturón con un latigazo y se apresuró con mano temblorosa a encajar la hebilla del cinturón en la puerta aunque no lo logró a la primera, entonces con un dedo se percató de que tenía una pequeña curva y fue entonces cuando por pura lógica imaginó que debía ir hacia arriba y en ese momento, no solo encajó la cerradura, sino que sintió como su pierna se despegaba del suelo, al momento escuchó el ruido de varios pasos y vio a lo lejos, las luces rojas de los ojos del resto de animatrónicos y que todas ellas, se abalanzaron encima del quinto robot, quien calló al suelo de modo estrepitoso. No pudo verlo, pero por el ruido de metal quebrándose, supo que lo debían de estar destrozando entre todos... ¿Quién no le decía que aquellos hermosos muchachos hechos de metal y silicona, no le habían mentido mirándole a los ojos? ¿Cómo sabía que estaba haciendo lo correcto? ¿Y si Jonghyun y los demás no eran lo que le habían querido hacer creer? ¿Y si no eran justicieros sino asesinos con un plan lo suficientemente bien preparado como para usar a un crédulo como él de carne de cañón y llevar al final de un camino en el que todo daba igual y lo matarían junto con el Director para que no quedaran testigos vivos de su magnificencia? Nada ni nadie le podía asegurar que no estaba siendo utilizado, quizás su intuición le había fallado... Le temblaron las piernas al abrir la puerta al ver venir los brillantes ojos de Jonghyun, Key, Taemin y Minho... Ante ellos, unas elegantes escaleras que subían directamente al despacho del director. De haber habido luz, Onew se hubiera percatado de que en realidad aquella puerta era invisible a simple vista, ya que estaba confundida con la pared, incluso el pomo que había tocado como si fuera una puerta normal. Sintió la mano de Taemin agarrar la suya como si supiera que necesitaba el apoyo de alguien y al poco vio que todos avanzaron de forma inexorable hacia aquella puerta que coronaba el alto de las escaleras... Al fin habían llegado, cinco noches de guerra psicológica de la que pensó que no saldría con vida... Miró su reloj en silencio en el momento en el que todos se pararon y cuando intentó prender la lucecita, se dio cuenta de que se le había reventado y por tanto, no podía ver la hora... ¿Cuánto habían tardado en pasar aquel pasillo? Él habría jurado que una insufrible eternidad... ¿Qué venía ahora? Seguramente tirarían la puerta abajo, o se giraría para ver a Taemin y éste le rompería el cuello porque había dejado de serles útil... Sintió que el corazón le iba a prisa y que incluso comenzaba a hiperventilar a causa de la tensión que su cuerpo comenzaba a acumular... Jonghyun, o al menos creyó que era él porque era el que siempre iba delante de los demás, abrió la puerta y se quedaron en silencio observando un pasillo que se extendía ante ellos, iluminado por pequeñas luces a los laterales de una sucesión de puertas que conforme avanzaban, se abrían a su paso.

Era una escena aterradora, al menos para él, como si las puertas al Infierno, se abrieran una detrás de otra dándole la bienvenida al lugar más horrible del mundo... EN cuanto cruzó junto a los animatrónicos la segunda puerta que ante ellos se abrió para darles paso, le golpeó en la nariz un horrible olor. Un olor asqueroso, herrumbroso, un olor que le provocó inmediatamente náuseas... Se detuvo al comenzar a sufrir arcadas y de no ser porque iba sujeto de Taemin, seguramente se habría ido de cabeza al suelo, mareado, apabullado por aquel hedor... El robot lo sujetó y los tres restantes se detuvieron a esperar, si bien por el humano que los había ayudado a llegar o por su compañero que se había rezagado con éste. Apenas le dio una arcada, Onew terminó vomitando y tuvo que recostarse brevemente en la pared para poder recuperar el aliento y en ese momento se fijó en algo más. Todo ellos estaban heridos, podía ver las abolladuras  de  balas en sus cuerpos, podía verlos gotear aún sangre fresca de los hombres que aquella noche habían perecido en sus manos y aún así, los sentía justos y bondadosos, como un grupo de amigos que estaba haciendo lo correcto... Incluso se fijó en que el animatrónico Nº1 y el Nº2, Jonghyun y Key, estaban agarrados de las manos, como dos novios que se apoyaban el uno al otro ante un momento difícil donde todo lo que tenían, era el uno al otro... Eran tan humanos como cualquier ser vivo y eso le hizo recordar que le debían explicaciones, que le habían prometido respuestas ¿cuándo llegarían esas respuestas? Se apartó de la pared y los cinco juntos como un grupo inseparable llegaron al final del pasillo que a pesar de la sensación de haber recorrido metros y metros del mismo, apenas habían sido unos veinte metros, nada excesivo y que sin embargo había lucido eterno... Cuando la última puerta cedió, contuvo la respiración, el hedor allí era más fuerte y penetrante, un olor al que pronto encontraría respuesta...
La luz de un potente foco le dio de golpe en los ojos y Onew sintió la necesidad de cubrirse inmeditamente con una mano para evitar que la luz le hiciera daño. El haber permanecido en una oscuridad total por tanto tiempo, hacía que le fuera difícil y complicado mantener los ojos abiertos. Al menos así fue durante los primeros segundos, escuchó la voz de un hombre, la voz del Director:


- No puedo creer que al final hayáis logrado llegar hasta aquí, hijos míos.
- ¿Hijos míos? -preguntó confuso Onew.



Aún usando la mano de visera para frenar la intensidad de aquel foco de quirófano que extrañamente permanecía encendido en el despacho del Director, se dio cuenta de que el despacho entero estaba forrado con una especie de lona de plástico transparente, como si estuvieran en un quirófano improvisado. Todo el lugar estaba bañado de sangre, las paredes goteaban sangre, el suelo goteaba sangre... A un lado, donde días atrás había visto una estaría, vio una pila de apróximadamente unos 5 cadáveres de niñas pequeñas... No debían tener más de diez años. No diferenció muy bien qué les había sucedido, sólo vio que estaban completamente desfiguradas y aún peor, que parecían haber sido abiertas en canal. Horrorizado, Onew giró rápidamente la cabeza hacia el lugar en el que debería estar ubicado el escritorio del Director, encontrando en su lugar, una camilla y todo un equipo profesional, todo lo que se podría encontrar en un quirófano, estaba allí y sobre la camilla, una niña que como las demás, no debía de tener más de 10 años, completamente abierta en canal... Y lo más escalofriantes de todo, era que podía ver sus pulmones inflarse por entre medio de sus costillas... Era una visión horrible y no pudo por más que vomitar... ¿¡QUÉ DIABLOS ESTABA PASANDO EN AQUEL SITIO!? ¿Es que todo el mundo se había vuelto loco en cuestión de días? Aquellas apreciaciones que se le antojaron eternas, no fueron sino unos escasos segundos en los que el Director tuvo tiempo de ver que no eran sólo los animatrónicos los que estaban allí, sino que el guardia entrometido , también había llegado vivo:

- Veo que usted también ha conseguido llegar, joven Onew Lee... Debo admitir que no esperaba que fuera tan resuelto. Cuando lo contraté en realidad pensé que moriría al poco .
- ¿Morir...? ¿Acaso sabía que ellos iban a venir por mi? ¿Qué diablos está pasando aquí ?
- Ya que haya llegado hasta aquí, se lo voy a explicar de forma que una mente simple como la suya, pueda comprenderlo... ¿O quizás prefiere que se lo expliquen ellos?
- ... -miró en silencio a los animatrónicos con la esperanza de que aún siguieran en el mismo bando - ¿Taemin?
- ...
- Lo que ves habla por sí mismo -dijo Jonghyun como única explicación.
- Deja que te lo muestre - dijo entonces el Director antes de encender un viejo proyector de películas.



¿Qué le pasaba a aquel enfermo? ¿Acaso se regodeaba viendo sus propios asesinatos? Porque lo único que en aquel momento tenía claro Onew, es que era un psicópata y un asesino de niñas, quizás incluso un pederasta, solo una cosa más a las que comenzaba a sumar aquel hombre... Si es que se le podía llamar hombre... Se fijó en las imágenes que se reflejaban en la pared y se quedó en silencio, más bien mudo por la impresión. Quienes salían en el vídeo, eran ni más ni menos que los cuatro animatrónicos, todos sobre camillas de hospital, abiertos en canal y llenos de sangre a su alrededor... Horrorizado pudo ver cómo el Director, en aquellos vídeos, les extraía los órganos uno a uno e incluso, como les sacaba los huesos y los sustituía por endoesqueletos metálicos a los que después iba soldando cables y maquinarias que él no comprendía... Onew giró la cabeza para ver a los cuatro animatrónicos, entendiendo que ellos, no habían sido creados de la nada, habían sido humanos, habían sido muchachos de poco más o menos su edad a los que por algún motivo o por una simple e infeliz casualidad, habían atrapado para experimentar con ellos... Los habían transformado, no, mentira, los habían mutilado y los habían asesinado para convertirlos en lo que ahora eran... ¿Qué significaba eso? Su mente se encontraba saturada y en shock mientras observaba en la imagen como uno de ellos, Minho, no había caído bajo los efectos de la anestesia y gritaba de dolor cuando aquel desgraciado demente le extraía como si tal cosa uno de los huesos del brazo... No tenía que ver ni saber nada más... ¿Entonces todas aquellas niñas que estaban acumuladas a un lado no eran otra cosa que experimentos fallidos? ¿Qué significaba aquello? ¿Qué estaba intentando crear otros animatrónicos?



- ¡Es un maldito desgraciado y un puto enfermo mental! ¿¡Qué es lo que le hace a la gente!? Los asesina a sangre fría con qué fin?
- Con el fin único de conseguir lo que me propongo que no es nada más ni nada menos que crear los hombres perfectos. Hombres resistentes a cualquier enfermedad e imperecederos.
- ¿¡Y todas esas niñas!? ¡Merece que lo torturen y lo maten por lo que está haciendo!
- ¿Lo merezco? Cuando el mundo descubra lo que he creado, los hombres ordinarios temblarán y los sensatos esperarán que los convierta en mis hombres perfectos y eternos. Los animatrónicos humanoides son el futuro. Desgraciadamente, me temo que conseguir que esto funcione en organismos que están sin desarrollar, aún no es del todo fiable. Pero todo experimento revolucionario, requiere algunos sacrificios y mucho esfuerzo. Como puedes comprobar, hay cuatro de ellos que quedaron perfectamente y que sin duda son mi mayor orgullo. Me han pagado millones por ellos, el ejército los quiere porque son casi indestructibles.
- ¿¡Y qué pasa con lo que quieren ellos!? Son capaces de sentir y de razonar. Son justos en el momento de tomar decisiones y... ¿y qué era esa cosa que se paseaba por el piso inferior?
- Justo el Nº5. Lo creé poco antes que a ellos y desgraciadamente fue defectuoso, la piel se desquebrajaba y fue terriblemente incapaz de mantener su pellejo completamente para que luciera bien. De modo que lo programé y oculté en el armario de las escobas de la planta 8 y se ocupaba de mantener a ralla a todos los metomentodo como tú y también a los demás animatrónicos hasta que lo has fastidiado todo y has conseguido que lo destrocen.
- ¿Y eso le preocupa más que las vidas que le está robando a esas niñas? No merece vivir y espero que ellos le hagan pagar por lo que está haciendo...
- Me temo, querido muchacho, que ninguno de ellos va a hacerme nada por algo muy simple. Sigo teniendo el control absoluto sobre sus decisiones. Sí,cierto que parece como si por ellos mismos pudieran decidir pero lo cierto es que eso es cosa mía porque están programados para ello -dijo orgulloso el hombre alzando la barbilla con arrogancia.



Entonces Onew comprobó que realmente ninguno de ellos cuatro se movía hasta que aquel hombre les ordenó que se acercaran a él para demostrarle al guardia de seguridad que estaba completamente equivocado y que sin duda ellos estaban a su merced y servicio... Los vio moverse con docilidad hasta el lado del Director como mascotas adiestradas incapaces de negarse a sus órdenes y sintió un escalofrío espantoso subir por su columna vertebral, de pronto, los que había creído hasta aquel momento sus amigos, lucían como los asesinos que pensaba que eran desde la primera noche y temió, más bien vio claro qué era lo que iba a suceder... El viejo les ordenaría que le atraparan y que lo subieran a la camilla, para que él pudiera abrirlo en canal e introducirle un endoesqueleto y moldearlo de ese modo como una nueva máquina...
Comenzó a respirar con dificultad, la imagen de tenerlos delante, junto al peor de todos los asesinos que podría haber conocido aquella ciudad, le hizo sentir que las piernas dejaban de responderle, no podría correr si se le echaban encima. Todo le daba vueltas y temblaba como una gelatina a la espera de la orden que haría que su vida quedara sentenciada del modo más horrible. Abrió los ojos de forma desmesurada cuando escuchó al Director ordenar "Atrapadlo". Su cuerpo entero quedó petrificado a causa del miedo, las caras que hacía unos segundos lucían amigables, se tornaron terroríficas y amenazantes... igual que el resto de noches... Esperó lo que sintió como unas interminables horas, pero transcurridos tan solo unos pocos segundos, escuchó un grito que le hizo volver a la realidad... Jonghyun había sujetado del cuello a aquel psicópata y lo había alzado del suelo mientras los otros tres animatrónicos lo rodeaban, cada uno sujetó una extremidad y comenzaron a tirar de ellas para arrancárselas, era evidente que iban subiendo poco a poco la fuerza con la que lo hacían, disfrutando de que aquel loco comenzara a gritar y berrear ordenándoles que se detuvieran, que él era su creador y que todo se lo debían a él... ¿Le debían algo? No... Aquel hombre los había mutilado, los había torturado y asesinado, ellos, no eran ellos, eran máquinas, máquinas que una vez fueron hombres y que de seguro tuvieron una vida que quedó sesgada de forma diabólica por la intervención de aquel hombre que estaba recibiendo justo lo que se merecía y aún así tenía ganas de maldecir,lo vio echando espuma por la boca mientras sus ojos se ponían rojos como si estuviera siendo víctima de una posesión demoníaca... Taemin fue el primero en arrancarle un brazo y lanzarlo por los aires como si se tratara de un papel sucio... El grito de dolor fue desgarrador... Luego lo secundó Key con una pierna y Minho con la siguiente, todo ello mientras Jonghyun lo mantenía sujeto por el cuello y alzado del piso. Entonces, lo que quedó, fue una masa sanguinolesta que agitaba aún el brazo que le quedaba mientras los maldecía con sus últimas fuerzas "¡¡NO SALDRÉIS DE AQUÍ CON VIDA!! ¡VAIS A PAGAR VUESTRA REBELDÍA! " Onew pensó que estaba loco y de hecho sintió que sin que él mismo se hubiera percatado, comenzaba a vomitar a causa no solo del olor de la sangre al oxidarse en contacto con el aire, sino de la visión de un cuerpo del que colgaban tendones y relucían sus huesos partidos en cada extremidad arrancada... Y entonces se percató de algo, el Director se llevó la única mano que le quedaba al cinturón y apretó algo que en éste había, quizás un botón secreto, instintivamente Onew gritó "CUIDADO" y en ese preciso momento, estallaron las bombonas de oxígeno que había en aquel despacho que lucía como un matadero humano y se formó una llamarada que él al menos, no supo de dónde salió. Cuando la metralla de las bombonas voló violentamente por los aires, solo tuvo tiempo de ver cómo Minho le cubría usando su cuerpo alto y atlético para frenar los afilados trozos con su espalda. De pronto todo estaba en llamas, el plástico había prendido rápidamente y él, se apresuró a abrir la ventana para ver con horror que aquel sitio era una ratonera sin salida y que peor aún, la escalera de incendios resultaba inaccesible desde allí. Giró para ver a los animatrónicos y se dio cuenta de que Jonghyun le estaba dedicando unas últimas palabras a aquel hombre que agonizaba en sus manos:


- Adiós, nuestro asesino y torturador... Nuestra pesadilla ha terminado pero...la tuya, solo acaba de empezar...


Tras aquella despedida, Jonghyun apretó tanto la mano al rededor del cuello del Director que la cabeza de éste, salió volando por los aires como si de un balón se tratara. Ninguno de los animatrónicos se movió hasta que Onew llamó su atención:


- ¡Tenemos que salir de aquí! Éste despacho está en llamas... ¡Vamos!



En cuanto se pusieron en marcha, Minho se adelantó para romper la puerta del despacho... Desgraciadamente, al tirarla abajo, se dieron cuenta de que no era sólo el despacho lo que ardía... Fuera lo que fuera que aquel hombre hubiera activado, estaba preparado para destruir absolutamente todo aquello que rebelara la depravada naturaleza de sus experimentos, de las muertes que él mismo provocaba y de toda su investigación sobre animatrónicos humanoides... Onew no lo pensó, se lanzó en carrera desesperada hacia la puerta de emergencia que tenía en la parte superior el letrero que indicaba que por allí llegaría a las escaleras contraincendios y sin más forzó la puerta hasta casi romperla y seguro de que sus amigos robóticos iban tras él, corrió escaleras abajo sin control alguno. Resultaba mareante bajar todos aquellos pisos de una sola vez, pero no miró atrás en ningún momento y en más de una ocasión, tuvo que cubrirse la cabeza cuando uno de los cristales explotaba debido a la intensidad del fuego cerca de dónde él estaba pasando. Cuando alcanzó la calle, solo miró hacia arriba en el mismo momento en el que llegaban los servicios de emergencia, los bomberos... Se apartó del edificio viendo cómo ardía cada vez con más intensidad y se quitó un poco de sangre de la mejilla. No fue hasta que unos ATS lo jalarón hasta una ambulancia al percatarse de que tenía pequeños cristales clavados por toda la cara y de los que , debido a la adrenalina no se había percatado; que se dio cuenta de que los animatrónicos no estaban allí. Se levantó entonces corriendo y gritando que aún había gente dentro, que tenía que sacarlos de aquel lugar... Alzó la vista y a pesar del humo negro, estaba seguro de haber visto la silueta de los animatrónicos observándole desde la ventana del despacho del director... Pero luego se percató de que no estaban allí... Vio a Taemin en una ventana del tercer piso, la zona infantil, mirándole o eso le pareció...Sí, le estaba mirando a él... Lo vio alzar la mano como una despedida y vio entonces una sonrisa de agradecimiento antes de que las llamas envolvieran por completo su figura. Horrorizado gritó y tuvo que ser sujetado por los sanitarios para evitar que tratara de volver dentro del edificio... En aquel momento escuchó un pitido repetitivo y giró la cabeza fijándose en el reloj de muñeca de uno de los hombres que lo agarraba... Marcaba las seis en punto de la madrugada.. Dejó de forecejear y giró la cabeza para mirar hacia el hospital en llamas... Por unos segundos, sintió que se levantaba la brisa y con ella, escuchó o eso creyó, la voz de todos aquellos animatrónicos dándole las gracias... Si se habían quedado dentro, era porque allí había empezado su pesadilla y allí debía acabar... No eran simples máquinas, tenían alma, sus almas estaban atrapadas por el dolor y la ira en aquellos cuerpos metálicos, pero ya no más... Ahora, eran libres y por fin, podían dejar atrás aquel Infierno, para poder descansar en paz...
Todo eso lo supo... con el simple pitido de un reloj...

☤✠ FIN ✠☤