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jueves, 30 de octubre de 2014

┣▇▇▇═─ LAND OF ENCHANTED ┣▇▇▇═─ [ESPECIAL HALLOWEEN]

Pareja: JongKey [Jonghyun + Key]
Género: Suspense
EEL: TP


Resumen: Key tiene al fin sus tan esperadas vacaciones y decide marcharse a Busan a un hotel barato,para no preocuparse de gastar mucho dinero.Allí conoce a Jonghyun,en plena noche,en un pasillo cuyas luces tintinean de forma misteriosa.




Por fin habían llegado mis vacaciones,después de la durísima campaña de Navidad.Había estado deseando irme a Busan desde hacía mucho tiempo,ciertamente es que no me apetecía salir del país porque eso significa aduanas y pasaporte y unas cuantas maletas que tendría que cargar a todos lados.
Preparé las maletas dos días antes del viaje y aún quedaba espacio en ellas por si consideraba que se me había olvidado algo o por si compraba algo en alguna tienda de Busan.
Vivía sólo,así que no le tuve que rendir cuentas a nadie de si iba o venía de ninguna parte.
Ya en el aeropuerto iba feliz pensando en mi destino.No me gasté demasiado dinero en un hotel de lujo,preferí probar suerte en un hotel de bajo coste.

Me he vuelto bastante tacaño.Mi economía antes me permitía concederme algún capricho de cuando en cuando.Pero la empresa en la que trabajo no va tan bien como gustaría y para evitar despidos y pérdidas nos han bajado el sueldo.
Por suerte,soy la clase de chico que todos los meses mete algo de dinero en la hucha y así tiene guardado por si surgen improvistos o en el caso actual,caprichos que requieren desplazamiento.Para ir a Busan podría haber escogido ir en tren,era más barato,pero eran demasiadas horas y yo no tengo la paciencia de verme en una lata de sardinas,encerrado tanto tiempo.Sin embargo en avión llegaré en 55 minutos.
Facturé el equipaje y me fui a la sala de espera en la puerta correspondiente a mi vuelo.Busan tenía algo que Seúl no,playas,maravillosas playas de arena blanca en las que disfrutar del sol y del mar.Hacía mucho que deseaba bañarme en el mar,como cuando era pequeño,casi todos los fines de semana,mis padres me llevaban a las playas de Busan...Claro que estoy seguro de que ahora con la incrementación del turismo en Corea del Sur para darle un empuje a la economía,estarían a reventar de turistas...No creo que pase nada siempre y cuando me dejen mi espacio.

El viaje transcurrió con normalidad,yo estaba muy tranquilo y entretenido en una novela picante que me habían dicho que estaba muy bien¿Que quién me lo dijo?Mi amigo Taemin.Era imposible que cualquier otra persona de mi entorno,tuviera el desparpajo de hablar abiertamente sobre sexo y cosas eróticas...Yo pensaba que aquella novela era una soberana tontería,porque al maknae le solía gustar cualquier cosa que pareciera sexo escrito,lo contrario que a mi...Pero debo confesar que era una muy buena novela y que de no ser por los "accidentes" que ya había tenido yo durante su lectura,podría haberme visto en la incómoda situación de tener que lidiar con una erección indeseada.Por suerte llevaba el bolso en el regazo y no se notaba,tampoco tenía pensado levantarme ni tuve necesidad de ello.Así que dejé de leer con el tiempo suficiente como para relajarme hasta que el avión aterrizó.
Lo que me frustraba de ir en avión es tener que esperar por mi maleta,a veces se me ocurría la terrible idea de que hubiera dos maletas iguales y que dieran lugar a confusión y yo me llevara el equipaje de otra persona y esa otra persona el mío,o simplemente que alguien decidiera robar mi maleta...Nunca pasaba,porque mis maletas eran demasiado sublimes como para tener dobles en alguna parte.No eran caras,pero yo mismo las había revestido y pintado de forma muy glamurosa.Así se diferenciaba de las demás.
Llamé a un taxi y di la dirección del hotel en el que iba a hospedarme.El taxista se extrañó y como hacen todos los que trabajan de taxista,me dio conversación.Me dijo que yo parecía un chico de bien como para quedarme en aquel lugar tan extraño, al que por lo general,iba gente menos pudiente. Le dije que aunque las fotos del lugar no me convencían,era un viaje low cost; además,el sitio quedaba no muy lejos de la playa,a la distancia suficiente como para que yo pudiera ir caminando hasta allí. Fue una conversación agradable y lo cierto es que me decidí a dejarle propina por ello.Me ayudó a bajar el equipaje del maletero y luego nos despedimos,no sin que antes me diera su número de teléfono.Miré el papelito que me había dado:

-Ya nos veremos pronto,señor Minho-le dije con una sonrisa divertida.
-Cuando quieras,tu sólo llámame-me guiñó un ojo y después de volver a meterse en su coche,se marchó.


Resultaba cómico que ya sin necesidad de quitarme la ropa,hubiera ligado.
Entré en el hotel y en principio no vi a nadie que pudiera atenderme en recepción y me resultó contradictorio.Dejé las maletas a un lado y toqué el timbre que en todas partes ayudaba a los recepcionistas a enterarse de que estaban haciendo esperar a un cliente por el hecho de haber abandonado su puesto de trabajo.
Estuve tocando aquel aparatito lo menos cinco minutos hasta que por el fondo del pasillo llegó corriendo un muchacho que por poco no tenía la lengua fuera.

-¡Lo lamento! 



-¿Dónde estaba?Llevo tocando ésto como cinco minutos-le dije disgustado.
-Lo sé,lo sé...Lo lamento...Estaba arreglando algunas habitaciones,la señorita de la limpieza no da a basto ella sola-me sonrió.
-Aún así,no debería marcharse¿y si entra alguien con malas intensiones?
-Bueno...Nunca ha sucedido,le ruego me disculpe...Soy Onew,el encargado.
-Encantado.Soy Kim Kibum,hice una reserva para una semana.
-Permítame-se puso a comprobar las hojas de registro.
-¿?¿Y bien?
-Sí,sí,aquí figura su reserva-me sonríó y me dio un bolígrafo para que firmara.
-Bien...Oh,tengo una pregunta,resulta que por teléfono se me olvidó hacérsela-firmé.
-Usted dirá.
-¿Tienen piscina o alguna clase de instalación de entretenimiento?
-Tenemos un gimnasio en el sótano y tuvimos una piscina exterior,pero no está disponible.
-Ya veo...-negué.En menudo sitio de mierda me fui a inscribir.


Decidí asumir las consecuencias de no querer gastar más dinero y darle una oportunidad a aquel sitio.Realmente no se veía descuidado ni nada por el estilo,era un lugar sencillo,algo oscuro,pero estaba muy bien cuidado.

-Aquí tiene,señor Kibum,su habitación en la número 13,está en el 2º piso-me extendió la llave.
-Bien,gracias.
-¿Quiere que le ayude con el equipaje?
-...¿No hay ascensor?
-Sí,sí que lo hay-asintió con una sonrisa amable-Lo preguntaba por si pesaban demasiado.
-Oh,que amable...Pero no,Gracias,no se preocupe señor Onew.
-Está bien,cualquier cosa que necesite,solo descuelgue el teléfono y pida.
-Lo tendré en cuenta.


Fui hasta el ascensor arrastrando las maletas y pulsé el botón.Lo cierto es que me sorprendía no ver a nadie por allí.Ningún turista ni nadie que se estuviera quedando o trabajando.Quizás a esa hora ya estaba todo el mundo en la playa o quizás durmiendo la siesta.Cuando las puertas metálicas se abrieron,miré hacia recepción al escuchar sonar el teléfono y me relajé al ver a Onew que lo cogía y hablaba con algún cliente.
La habitación era lo suficientemente grande como para que yo me sintiera feliz por ello.Deshice las maletas y coloqué la ropa de forma organizada y meticulosa.Me encantaba tener el armario distribuido por colores. Una vez todo bien ordenado,fui al cuarto de baño para cambiarme,ponerme ropa ligera y el bañador.Me deshacía en ansias por ir a la playa.La luz de encima del tocador hizo chiribitas y me quedé extrañado mirándola.Como seguía tintineando,me decidí a ir a coger el teléfono y esperaba que Onew no me tuviera esperando 5 minutos.

-¿Diga?
-Onew,soy Kibum,de la habitación 13.
-Sí¿necesita algo?¿Hay algo fuera de sitio o que no está a su gusto?
-No,no,todo está muy bien,es la luz del baño,creo que se está fundiendo.
-Oh,enseguida subo a comprobarlo.
-Muchas gracias-colgué y suspiré mirando a un lado.


Me senté en la cama y encendí el televisor para ver algo mientras llegaba Onew.
No tardó tanto como me pensaba que tardaría.Tocó a la puerta y le abrí.Venía con un bombillo de repuesto por si realmente se estaba fundiendo y con mi permiso entró al baño a revisar lo que sucedía.La luz seguía haciendo chiribitas y él simplemente sujetó la bombilla y la enrroscó debidamente,de modo que la luz permaneció fija.Me sentí estúpido,aquello me había pasado alguna vez en casa y no recordaba ni por asomo haber hecho eso,directamente compraba otro bombillo y lo cambiaba.

-Gracias-alcancé a decir.
-No hay de qué-me sonrió-¿Alguna otra cosa?
-¿A qué hora se sirven las comidas?
-Pues el desayuno es de 7 a 9, la comida de 12.30 a 15.30 y luego la cena es a las 20.00 hasta las 22.00.
-Está bien,muchas gracias,Onew.
-De nada señor Kibum.
-Llámame Key-le sonreí.
-En ese caso,Key.


Se despidió de mi,pero lo cierto es que le di alcance ya que quería ir a la playa.No tenía hambre de nada que no fuese el mar y la arena.Bajando juntos en el ascensor ninguno dijo nada,aunque el muchacho era simpático,no dejaba de ser el encargado del hotel y yo su cliente,así que algo de respeto se debía mostrar al menos por ello.

Pasé el resto del día en la playa,tomando el sol,nadando,comiendo helado y conociendo gente joven que al igual que yo,habían ido a desconectar un poco de sus trabajos.Incluso conocí a algún español que estaba de turismo y con el que vagamente me pude entender en su idioma.A la noche me fui con mi nuevo grupo de amigos a un garito en la playa,a tomar copas y picar algo,un poco de kimchi entre otras cosas.No regresé muy tarde al hotel,no me gustaba ir por la calle si era muy tarde.
Cuando entré en recepción,los pasillos estaban oscuros y la luz que había sobre el mostrador en el que se encontraba Onew dormitando,apenas iluminaba hasta la zona de los ascensores.Le di las buenas noches y caminé hasta las puertas metálicas y pulsé el botón.Entonces cundo la puerta se abrió,me salió al paso un chico y grité de sorpresa al no esperar encontrarme con nadie.

-¡KIAA!

-¡Joder!-gritó el desconocido.
-¿Ocurre algo,Key?-dijo Onew desde recepción.
-N-no...-me llevé una mano al pecho-Me ha dado un susto de muerte.
-¿Yo?Si no he hecho nada-me miró extrañado y luego se marchó de forma apresurada.
-¿Y ese quién es?-pregunté a Onew desde mi posición.
-Oh,es el inquilino de la 66 en la 6º planta-me dijo sin prestar mucho más caso a mi persona.


Extrañado,subí en el elevador y cogí aire mientras me calmaba del susto que me había dado.Entré en mi habitación y me di cuenta de que tenía que ducharme para quitarme todo el salitre y la arena que pudiese llevar encima.Así que me metí a la ducha y me sentí irritado cuando el bombillo comenzó de nuevo a hacer chiribitas,debió aflojarse de nuevo o quizás habría algún problema en la instalación y por eso los pasillos estaban tan oscuros y sin luz.Ya le preguntaría por ello a Onew por la mañana.
Mientras me secaba,la luz del tocador se apagó y me quedé a oscuras en el baño.Por suerte tenía encendida la de la habitación,porque sino,me habría dado un buen golpe en el pie o en el hombro.Me puse el pijama y me acomodé para dormir.
Cuando creí que ya estaba durmiendo,escuché que tocaban a mi puerta y gruñí malhumorado al incorporarme y revisar en el reloj que eran las 3 de la madrugada.Más golpes.Empecé a ponerme nervioso,me levanté y me acerqué a abrir la puerta tras encender la luz y me quedé de piedra.

Me supe pálido al ver a aquel chico cubierto de sangre:

-¡¡OH DIOS MÍO!!¿S-se encuentra bien?-lo sujeté por los hombros al ver que se desfallecía.
-MMnf...¿Tiene un vaso de agua...?Solo...me gustaría tomar algo...
-P-pero...-lo ayudé a entrar en mi habitación-¿Está herido?¿Dónde le duele?
-Agua...-repitió con voz jadeante y cerró los ojos apoyando la cabeza en el respaldo del sofá.
-U-un momento...


Corrí a la habitación y descolgué el teléfono para hablar con Onew,pero aparentemente estábamos sin línea.Maldije y en ese momento explotaron las bombillas de la habitación.Tal vez un sobrecaletamiento...Volví al salón y le dejé al desconocido una botella de agua.

-Cálmese,iré a buscar ayuda.


Salí corriendo de la habitación,ni siquiera se me ocurrió pensar que el agresor podía estar por los pasillos y bajé a toda velocidad las escaleras hasta llegar a recepción.Todo estaba oscuro salvo la luz de la lámpara del mostrador.No había rastro de Onew.Se me erizó el vello de la nuca y toqué el timbre preocupado de no verlo,pero claro,era tarde,lo más probable es que estuviera durmiendo.Era muy tarde,pero justo cuando iba a  pasar dentro del mostrador para coger el teléfono y llamar a emergencias,apareció el encargado.

-¿Ocurre algo,Key?
-E-es el chico de antes...¡Llama a una ambulancia!
-¿Una ambulancia?Tranquilízate,Key¿qué pasa?-me sujetó por los hombros al notarme alterado.
-El chico del ascensor...E-está sangrando,vino a mi habitación y está sangrando,llama a una ambulancia.
-¿Chico?¿Qué chico?-le mira interrogante.
-¡EL de antes,el de la habitación 66!
-¿Ah?¡Oh,creo que ya sé de quién habla!-me sonrió-Se refiere a Kim Jonghyun.
-¡Basta ya!¡Te digo que está herido!¿No piensas hacer nada?
-¿Qué ha ocurrido?
-Está sangrando,tenía toda la ropa llena de sangre...
-Ah,ya lo recuerdo...Hace dos años,vino una pareja de jóvenes que por lo visto pertenecían a la policía de Seúl,pero estaban de vacaciones...Jonghyun tuvo un altercado con su pareja,ambos se quedaban en la 66,por lo visto la pelea se les fue de las manos y con una escopeta disparó a quemarropa al otro chico.Se volvió loco y fue por el hotel matando a todos los clientes¡Imáginese el escándalo!Incluso a mi me disparó.


En ese momento abrí mucho los ojos cuando se apartó el fleco de la frente y me mostró un orificio de bala justo en el centro mismo de su frente.Sentí que me desmayaba y giré la cabeza al escuchar un arma cargarse,del mismo modo en el que se escuchaba en las películas y allí estaba el chico que había venido a mi habitación cubierto de sangre,con una escopeta en las manos,chillé y salté tras el mostrador y jalé del teléfono para llamar a la policía y vi que Onew no se movía del sitio.No podía ser por menos que porque estaba muerto...No lo comprendo¿he tomado de más y es todo una pesadilla?Un disparo al mostrador me hizo gritar de nuevo y salí corriendo rumbo a las escaleras y traté de agacharme para que no me diera ninguno de los disparos.Yo no había hecho nada y me disparaba.No lo comprendí.De pronto toda la gente con la que no me había cruzado durante el día se metió por medio en mi huída.Todos con algún disparo en alguna parte del cuerpo.Llegué a mi habitación y cerré la puerta,apresurándome a ir en busca de mi móvil para llamar a la policía.Pero estaba todo oscuro,las luces no funcionaban y no había modo de dar con él.Recordaba que lo había dejado en la habitación así que a tientas fui hasta allí para buscarlo.
Un golpe en la puerta y me tensé al sentir que ingresaba en la habitación y me cubrí la boca para evitar que escuchara mi respiración jadeante y entrecortada.Escuché sus pasos pesados y lentos y me fijé en que el móvil al fin daba señal y llamé a emergencias a  riesgo de que me pillase.Justo en el momento en el que contestó una agente,escuché un disparo y al poco un terrible escozor me llenó el pecho,miré hacia arriba,había disparado contra el colchón y me había alcanzado,no sé cómo,no entiendo cómo,pero lo había hecho.


-Bienvenido al Hotel de la muerte,Key.A partir de ahora vivirás con todos nosotros.



FIN

domingo, 19 de octubre de 2014

♣♣ LA CONCUBINA DEL EMPERADOR ♣♣

Pareja: MinKey [Minho + Key]
Género:  Suspense
EEL: +16


Resumen: Minho es el hombre más poderoso de las tierras conocidas,un emperador astuto y de mano severa que según cuentan cientos de leyendas que rodean a su persona,tiene más de mil años a pesar de que su aspecto es el de un joven de 20  y en el palacio murmuran que debe de haber encontrado el "elixir de la eterna juventud"...A lo largo de los años de su gobierno,se le ha llegado a llamar monstruo porque sus concubinas aparecían a menudo descuartizadas en los patios interiores del palacio...Todas,excepto una,la joya de su larga colección de bellezas;no era una mujer,pero poseía la hermosura de una.En el palacio cuentan que Minho lo mandó raptar cuando era apenas un niño para que creciera cerca suyo y poder ver de cerca su desarrollo corporal.



SEGUNDO GANADOR DEL CONCURSO
OMMA[Xib]







































Caminaba por los jardines de su palacio,con los brazos cruzados.
Era invierno y la nieve le cubría hasta los tobillos,no le gustaba que los criados retirasen la nieve si ésta no se derretía por sí sola,lo mismo sucedía con las hojas secas en el otoño,el patio se cubría de una alfombra de diferentes tonos rojizos por los que siempre caminaba.
Contaban las leyendas que el emperador Minho I llevaba vivo más de mil años.Nunca se había escuchado que naciera un heredero o una heredera,ni que tomase una esposa para ello.Quienes trabajaban en el palacio vivían confinados en él desde el momento de su ingreso hasta que eran demasiado viejos como para seguir con la estricta rutina de aquel extraño gobernante que rara vez abría la boca para decir algo.Su palacio era un lugar silencioso y todo lo que se escuchaba era el murmullo del agua de sus estanques y el viento colarse entre las paredes.Incluso las mujeres que trabajaban en la cocina,permanecían en silencio o susurraban al oído de otra.Cada persona que allí vivía,sabía de sobra cuál era su papel y cómo debía desempeñarlo siempre.Eral tal el silencio que si se caía una cuchara en la cocina,podía escucharse al otro lado del jardín.



Al emperador Minho,no le gustaba nada el ruido,todo aquello que no fuese ruido natural,le molestaba y conllevaba un castigo para disciplinar a quien fuese escandaloso sin necesidad,dentro de su gran fortaleza.
Su palacio y jardines,eran su mundo propio, un mundo a parte en el que todo parecía tener una misteriosa armonía...
Sin embargo,en ocasiones,alguna de las concubinas de aquel hombre aparecía mutilada en medio del jardín,rodeada de un charco de sangre.Siempre daba la impresión de que huían de algo y todos los criados que se encargaban de recoger los pedazos de aquellas pobres chicas,coincidían al pensar que era el propio emperador el que las acechaba por la noche,con alguna forma monstruosa y las perseguía para alimentarse.Nadie escuchaba nunca los gritos,pero era imposible que las muchachas no gritasen ante tan terrible destino. ¿Y por qué sospechar del señor del palacio? Quizás porque era un hombre muy extraño o porque sólo él y algunas mujeres podían acceder a la parte del palacio en la que se encontraban sus concubinas; y de sobra se sabía que ninguna mujer del servicio era capaz de hacer semejante atrocidad.


Hacía unos años,Minho había salido de su palacio,después del último centenario sin pisar el país que gobernaba desde las sombras.Incluso las bulliciosas calles del mercado enmudecían a su paso.Le rodeaba un aura tan oscura que era imposible no temerle.Todos los campesinos se inclinaban con respeto y sumisión a su paso.Los pasos del emperador guió a su pequeño séquito de guardias hasta uno de los barrios más pobres de la ciudad, un barrio apestoso y sucio,en el que la gente se dedicaba a negocios de dudosa reputación. En silencio,Minho tocó con los nudillos a la puerta de una de aquellas casas. Una anciana abrió y se sobresaltó al verle,hizo una reverencia y se apartó de la puerta. El emperador entró cubriéndose la nariz con la manga de su traje, el hedor de aquella zona era insoportable, y pasó a la siguiente habitación de la casa,encontrando allí a una mujer de unos treinta y tantos, acostada en su futón y con un bebé envuelto en pañales a su lado. Se acercó hasta la mujer y se inclinó a coger al pequeño para descubrirle la cara, era aquello lo que estaba buscando en aquel sórdido lugar. La mujer lo miró confundida y el soberano sin tener que dar explicaciones,se puso en pie con el niño en brazos y dejó caer al suelo 3 monedas de oro como pago por lo que se llevaba. Nadie dijo nada y su guardia personal parecía tan confundida como aquellas mujeres...¿Iba a ser aquel niño salido de ninguna parte el nuevo soberano?¿Lo quería para alguna clase de ritual oscuro? Nadie lo supo hasta muchos años después.
Aquel joven se crió durante sus primeros años en los aposentos del emperador y tenía tanto poder como él,pues lo que deseaba, lo obtenía, cualesquiera que fueran sus caprichos,eran concedidos a la menor brevedad de tiempo. Ya con cinco años,el pequeño Kibum, fue enviado a las dependencias de las concubinas, el deseo del emperador era que fuesen enseñándole cómo ser un buen desahogo sexual. Nadie comprendía porqué de pronto parecía que le interesaban los hombres a pesar de que aquel niño no tenía aspecto de hombre. Ciertamente el favorito del emperador fue bastante maltratado por las celosas muchachas, que en muchas ocasiones lo instruyeron del modo equivocado e incluso trataron de desfigurarle la cara con una navaja y lo habrían logrado,si el emperador no hubiese aparecido.Todas las participantes en ese intento frustrado,fueron degolladas al día siguiente en el patio por el mismísimo Minho. Sirvió de ejemplo a las demás para que no dañasen algo que no era de su pertenencia.Por tanto, Kibum resultaba tan intocable como el emperador y era el único que rompía el monótono silencio del palacio,con risas y juegos en los que sólo participaba él. Y nadie decía nada,si al emperador no le molestaban sus risas, a nadie tenían porqué irritarle. Durante la primavera y el verano, el joven Kibum jugaba a perseguir animalillos por el jardín o a recoger flores,en otoño amontonaba hojas secas y se lanzaba sobre ellas,así varias veces hasta que se aburría y regresaba a las dependencias de las concubinas; finalmente durante el invierno,no era extraño verlo hacer figuritas con la nieve.
Llegó un momento en el que el resto de concubinas sintieron odio por él. Cuando Minho se dignaba a ir a las habitaciones de sus cortesanas, sólo era para ver a Kibum, a ninguna le pedía que se pusiera en pie para verla,ecepto a él,inclusive le ordenaba que se desvistiera de su hanbok para poder verle bien. Lo revisaba con la mirada y el joven se sentía incómodo, aquellos ojos parecían amoratarle la piel con solo fijar la vista en algún punto concreto de su anatomía...No lo decía,pero aquel hombre siempre le había aterrado, aunque le hubiera criado desde que tenía memoria y a pesar de que nunca le dijo nada respecto a sus escandalosos juegos en los jardines,pero le tenía miedo. 
Se le disparaba el pulso cada vez que se cruzaba con él,aquello ojos que escondían dentro a una bestia,le aterraban, e incluso llegó a presenciar el hallazgo del cadáver de alguna de aquellas mujeres con las que solía dormir. Todos en el palacio sabían que era el emperador el responsable de aquellas masacres, pero siendo la máxima autoridad,nadie se atrevía a ponerle remedio. Los guerreros tenían miedo de él y alguna vez, escuchó decir a una de las cocineras algo como "Nuestra nación se ha mantenido rica y próspera durante más de mil años gracias al emperador¿qué importa una cortesana muerta si la gente tiene pan que llevarse a la boca?" .Aquello le hizo pensar en si el resto de personas, les veía como seres humanos o como simples objetos de usar y tirar.Él también era una cortesana del emperador¿entonces su vida no le importaba a nadie?

Cuando cumplió 16 años,lo sacaron de las habitaciones destinadas a las concubinas y le trasladaron a unas habitaciones más cercanas a las del emperador.Tenía criados a su disposición y casi todo lo que pedía, lo conseguía.A menudo se preguntaba qué había más allá de los muros de la ciudad,pero sus peticiones de salir cayeron en saco roto.

Una noche de invierno,mientras veía por una de las puertas de su nueva habitación,como caía la nieve,escuchó que a sus espaldas había alguien...Lo identificó por aquel escalofrío de puro terror que le recorría la piel cuando él estaba cerca.Era el emperador.
Permaneció inmóvil sin saber qué hacer,si girarse o decirle algo...Sabía bien lo que hacía aquel hombre con sus concubinas,pero no estaba seguro de si le esperaba el mismo destino ya que siempre le había dado mucha más libertad...


En su nuca se posaron unos labios gélidos,que le hicieron encogerse de frío con la sensación de que aquello le estaba produciendo cortes en su nívea y aterciopelada piel. Una mano firme e igual de fría que aquellos labios,lo obligó a girar la cabeza tras sujetarlo por la mandíbula. Kibum giró a ver al emperador y jadeó con fuerza al ver aquellos ojos animales,enrojecidos,inyectados en sangre...Contuvo la respiración cuando Minho se acercó a besarle,temblaba de miedo mientras sentía como le arrancaba el hanbok de cuajo y lo echaba bruscamente sobre el suelo.

-P-por favor...No me hagas daño...-susurró el menor con lágrimas en los ojos-No quiero acabar desmembrado...
-Sssh...No temas...


Aquella voz le provocó escalofríos y sintió como su cuerpo se encogía de puro terror.
Minho se arrancó su propia ropa y se lanzó a poseerle como un animal embravecido y sediento de sangre.Kibum gritó al verse arañado y mordido,como si fuese la cena de aquel hombre,su cuerpo fue llevado al extremo a posturas insospechadas,cosas de las que él nunca supo nada,no recordaba que en ninguno de aquellos libros que hablaban de sexo,aparecieran las posturas en las que aquel hombre o animal le obligó a realizar.
Ya jadeando sobre el suelo de su habitación,pensé que su tortura había acabado por fin.Pero ni mucho menos,Minho volvió a colocarse encima de él y sujetándolo por la cintura lo penetró de nuevo.Un grito agudo salió de las cuerdas vocales del menor y pudo ver con horror como su piel se ennegrecía y volvía resbaladiza como las escamas de una serpiente.Dientes afilados surgieron de pronto de entre sus labios surgieron colmillos afilados como garras...A pesar de la oscuridad que envolvía la estancia,los ojos rojos del emperador destacaban por su escalofríante resplandor...Estaba casi seguro de que era un demonio pero no comprendía el significado de que lo fuera ni de que pasase toda la noche haciéndole gritar de dolor,dejando heridas por todo su cuerpo.Cayó rendido sobre el suelo,inconsciente,incapaz de comprender lo que sucedía ni el porqué había terminado por abandonarse a lo que aquel ser de la oscuridad quisiera hacer con su cuerpo.


La mañana le descubrió acostado en su futón,al lado de aquel hombre...Al abrir los ojos se dio cuenta de que Minho estaba a su lado,desnudo como él,pero le daba la espalda.A primera vista no daba la impresión de haber ocurrido nada fuera de lo normal a pesar de que él sentía todo el cuerpo dolorido y la espalda del emperador estaba llena de arañazos.
Kibum se incorporó un poco y apreció que el cabello oscuro del emperador presentaba varios mechones canosos.Se extrañó por ello.Hubiera jurado que la noche anterior,cuando aún presentaba el aspecto de un hombre,no tenía una sola cana...Le horrorizó pensar que un viejo podrido era lo que su mente había transformado en un demonio por el miedo.Intentó moverse un poco para poder ver la cara del gobernante y comprobó que sí que se trataba de él.A pesar de aquellas canas en su cabello,se veía joven como siempre.

-¿Ya despertaste?-dijo el mayor clavando su fría mirada en los ojos del pequeño.
-Y-yo...B-buenos días,emperador-baja la cabeza en señal de sumisión sintiendo como su pulso se dispara.
-Descansa-dijo con voz queda-Estoy agotado...Anoche me diste muchísimo trabajo.
-L-lo lamento,emperador...
-Vas a tener un hijo mío.
-¿C-cómo dice?-se tensa y lo mira con los ojos desorbitados.
-Vas a tener un hijo mío-repitió sin que su tono de voz variase en lo más mínimo-A partir de hoy se te serán concedidos todos los caprichos que precises para ocuparte de que el niño nazca sano.


Dicho aquello,Minho se puso en pie y sin vestirse,marchó de los aposentos de su concubina preferida.
Kibum se mantuvo en silencio largo rato,acostado,preguntándose el porqué con la edad tan temprana que tenía,el gobernante deseaba hacerle tener un hijo suyo...Cualquier otra concubina se hubiese sentido halagada por ser elegida para traer al mundo un heredero para el monarca,pero no era su caso.Aún era demasiado joven como para comprender de qué servía tener un bebé.

Minho no volvió a aparecer por los aposentos del joven Kibum en varios meses,tiempo en el que el menor,apreció como su vientre iba hinchándose y se abultaba poco a poco.Pero era afortunado,cuanto se le antojase,lo tenía a su disposición,ya fuera comida o ropas o simple compañía que le hiciera sentirse bien y feliz.Volvía a ser objeto de malas lenguas,de las envidias del resto de cortesanas que siempre que le veían pasar,murmuraban entre ellas,calumniando a su persona como si se tratase de un vulgar criminal que se había hecho pasar por un buen hombre y cuya actuación había convencido al emperador...¿Para qué mentir?Todas ellas estaban enamoradas de aquel siniestro hombre,pero él no...No podía enamorarse de alguien que le inspiraba miedo y a quien estaba seguro de haber visto transformado en un demonio y que a pesar de que no volvió a coincidir con él en varios meses,sentía aquella presencia diabólica rondar por las noches su habitación,quizás a la espera de que se durmiera para poder matarle o simplemente para atormentar sus sueños...Tal vez,incluso,solo para recordarle que estaaba ahí y que además estaba pendiente de él y de ese bebé.

Un día,ya pasados casi 6 meses desde la concepción de aquella nueva vida,pidió al emperador poder entrar en la gran biblioteca del palacio,con el fin de buscar cuentos con los que entretenerse ya que aquel pequeño que crecía en su interior,comenzaba a dificultarle un poco el movimiento. Minho concedió su capricho,uno más de una larga lista de deseos que tenía aquel joven doncel.
Kibum se sintió como un niño explorando un lugar nuevo cuando las polvorientas puertas de la biblioteca fueron abiertas para él,para su expectación y deleite,dejando a la vista miles de pergaminos y libros que se amontonaban en viejas estanterías de madera de roble.Allí el olor predominante era el de la humedad,muchos de aquellos pergaminos y libros,no se tocaban desde hacía muchos años...Buscó cuentos,leyendas,historias que le hicieran volar lejos de aquel palacio,solo con la imaginación,puesto que le estaba completamente prohibido salir de entre las murallas.Tenía tanto tiempo que gastar mientras el bebé crecía que en poco tiempo,aquella gran biblioteca se quedó sin leyendas que contarle. Ahora los libros que se resistían a ser leídos,eran tomos sobre pesada filosofía,astrología y matemáticas,cosas que alguien como él no comprendía por muy bien explicado que estuviera...
Un día,revisando los manuscritos ya leídos, se percató de que al fondo de una de las estanterías,había un libro descarcarillado en el que nunca había reparado.Quiso ojear de qué se trataba,pero tenía un candado...Era la primera vez en su vida que veía un libro con un candado¿qué debía de tener aquel tomo para que estuviese cerrado de esa manera? Un escalofrío subió por su espalda,sintiendo que de pronto aquel demonio de ojos rojos estaba tras él,mirando lo que hacía. En un impulso puramente intuitivo,volvió a dejar aquel libro en su sitio y exclamó con la voz más alegre que pudo que había encontrado el cuento que buscaba y rápidamente su mano atrapó un libro de cubierta oscura que relataba pequeñas historias sobre un monstruo japonés que habitaba en los ríos. Mientras fingía buscar un relato de los muchos que había escrito entre aquellas hojas, sintió cómo la presión de la mirada de aquel ser de pesadilla,desaparecía. Finalmente giró la cabeza y suspiró aliviado al ver que en aquel rincón oscuro no había nadie.Sus ojos volvieron a posarse sobre el libro cerrado con el candado y juró que encontraría la manera de abrirlo y leer lo que contenía. Quizás volviese en otro momento,ahora el emperador sabía que él vio aquel libro, pero pensaría que no le prestó atención y eso justamente iba a buscar la manera de aprovecharlo en su beneficio...Quizás podría ir en medio de la noche a buscarlo...No,eso era una idea más bien suicida.Los demonios venían durante la noche y sabía que aquel, lo vigilaba hasta que el sol asomaba por el horizonte,así que de noche no podía ir a ninguna parte y durante el día no estaba seguro de en qué momento se encontraba verdaderamente solo.

Tardó varios días en regresar a la biblioteca,como una maniobra de distracción. La suerte estuvo de su parte cuando escuchó rumores de que el emperador iba a salir a la ciudad por motivos políticos. En ese momento se debatió entre abrir el libro en su ausencia o suplicarle que le dejara salir a ver el mundo que se escondía tras las altas murallas del palacio y del que apenas sabía lo que leía en los cuentos...En las escaleras que daban al edificio principal del palacio,observó con el corazón encogido,como aquellas pesadas puertas de la muralla,se abrían dando paso al emperador y su séquito de guardias. Deseó con todas sus fuerzas correr tras él para pedirle que le permitiera acompañarle a las afueras pero se contuvo.Seguramente aquella iba a ser la última vez que tuviera ocasión de ver aquellas puertas moverse.
Cuando estuvo seguro de que el emperador Minho estaba lejos de las murallas,corrió a la biblioteca a buscar aquel ejemplar. Seguía justo donde lo había encontrado la vez anterior.Entusiasmado,lo escondió bajo su hanbok y corrió apurado de regreso a su habitación,cerró las puertas que daban al pasillo y se apuró a recostarse en su futón mientras intentaba romper aquel candado con las manos.Nada.A pesar de lo viejo que se veía,seguía siendo fuerte.Buscó cualquier objeto metálico y alargado que le sirviera para hacer palanca y en ésta ocasión,tras varios minutos insistiendo sobre el mismo punto y aumentando cuanto podía la presión,logró romperlo. Sudaba por el esfuerzo y tardó algunos minutos en centrarse en el libro,pues prefirió cerrar los ojos momentaneamente para descansar.Su avanzado estado de preñez era lo que le hacía estar agotado con poco esfuerzo.Incluso se quedó dormido por unos momentos,pero el canto de un pajarillo lo hizo despertar dando un respingo.Confundido miró su habitación y luego recordó que el libro estaba abierto,lo tomó entre sus manos y se apresuró a abrirlo para leer.Se extrañó al darse cuenta de que estaba escrito en una tinta roja y oscura en lugar de negra.
Su pulso se aceleró por la emoción y comenzó a leer.Narraba la historia del antiguo gobernante,el padre de Minho.Por lo visto había sido un tirano y al nacimiento de su único hijo le precedió un mal vaticinio.Sería un niño enfermizo y moriría antes que su padre,provocando que a la muerte de éste,el país quedase sin soberano,el nombre del emperador se perdería para siempre,sería borrado de la historia y sobrevendrían tiempos de hambruna y guerras. Aquel hombre, vendió el alma de su propio hijo a cambio de la fuerza necesaria para que éste pudiera gobernar sin que ningún otro emperador ni mandatario,lo borrase de la historia...Sintió que se le cortaba la respiración...Una hechicera le dijo que tenía que desangrar a todo niño nacido durante aquel año y bañar a su hijo en la sangre de todos aquellos niños mientras se lo entregaba a los demonios antiguos. Aquel año la masacre de niños por parte del emperador fue de proporciones inimaginables...Poco tiempo después en el palacio comenzaron a suceder cosas extrañas.Chillidos escalofriantes quebraban el cielo y el silencio...Comenzaron a aparecer mujeres muertas en el palacio y en sus alrededores,todas desmembradas o degolladas como animales.Cuando Minho cumplió 12 años,asesinó a su padre y se confinó entre aquellos muros de piedra.Su gobierno fue próspero a pesar de que nadie conocía al nuevo gobernante,,,pero había algo más...Aquella maldición que pesaba sobre él,le obligaba a devorar niños cada cincuenta años,para mantenerse joven y vital,para seguir en el poder como dictaminó su padre...

-Y su séquito de demonios le ayudará a que cada cincuenta años,las aguas de sus pozos y fuentes hieran a sangre...-lee la última frase y baja despacio el libro.


Aquello era demasiado irreal,no era cierto nada de lo que ponía ese estúpido libro...¿O sí lo era?
Se levantó corriendo de su futón y echó a correr por uno de los jardines del palacio.De pronto el miedo se había activado en su cerebro como un resorte,una respuesta inmediata e instintiva ante un peligro que no estaba lejos y que quería matar a aquello que estaba creciendo en su vientre.


Sus pasos se detuvieron en seco cuando de la nada,surgió Minho y clavó sus ojos rojos en él:

-Kibum...mi Kibum...no puedo dejarte marchar.
-Por favor...no diré nada a nadie...-susurra.
-Necesito a ese niño...No vas a irte y llevártelo de mi lado.
-...No voy a permitir que te lo comas...
-Kibum...Sabes demasiado-se acerca y le sujeta por los hombros-Te encerraré en las mazmorras,nadie te hará caso ni creerán tus locuras...Entonces cuando mi hijo nazca,tú y él alcanzaréis el fin para el que ambos nacistéis.Prolongar mi reinado durante cien años más.
-¡¡NO!!¡¡KIAA!!






FIN...

viernes, 10 de octubre de 2014

( ̲̅:̲̅:̲̅:̲̅[̲̅ ̲̅]̲̅:̲̅:̲̅:̲̅ ) KEY Ø MEW MEW ( ̲̅:̲̅:̲̅:̲̅[̲̅ ̲̅]̲̅:̲̅:̲̅:̲̅ )

Pareja: JongKey [Jonghyun + Key]
Género: Comedia Romántica
EEL: TP


Resumen: Jonghyun ha sido desde pequeño el cerebrito de la clase.Sus altas notas y su impecable expediente le han costado el verse sin amigos desde muy temprana edad.
Ahora,en su primer año de universidad,ya opta a un puesto como alumno honorario.Pasa largas horas estudiando en la biblioteca tras la jornada escolar y vuelve tarde a su pequeño apartamento.
En una de esas ocasiones,corre apresurado bajo la lluvia y encuentra una caja,con un gatito bebé,que maulla de forma lastimera como si llamara a su mamá.Conmocionado,Jong agarró al felino y se lo metió en la chaqueta para darle calor.Fue el comienzo de una amistad que ni mucho menos imaginó a dónde le iba a llevar.



PRIMER GANADOR DEL CONCURSO
JONGHYUN CLOUDS






























Odio cuando mis padres dicen que estoy desperdiciando los mejores años de mi vida por no tener amigos.No es mi culpa que mi intelecto esté por encima del de todos los demás.Lo cierto es que mis compañeros me aburren,desde que estaba en primaria me aburren.Son todos muy básicos y siempre están hablando de tonterías y no piensan en otra cosa que no sean tonterías.
Durante la escuela primaria y los primeros años del instituto,sufrí abusos por parte de compañeros que siempre venían a pegarme o a insultarme,así que a mediados de la secundaria,me apunté al gimnasio y poco a poco fui sacando músculo.Quizás eso me hizo quedarme algo más bajito que el resto,pero bien que logré que no volvieran a tocarme las narices.

Finalmente entré en la mejor universidad de todo Seúl a estudiar medicina,una carrera que sin duda tendría un nivel de dificultad a la altura de lo que yo necesitaba para no aburrirme.
En el campus todo el mundo habla sobre las fiestas que habrá durante el curso,de hacer amigos para toda la vida;cosas para las que yo nunca he tenido tiempo...De todos modos sí que hubo gente que se acercó para hacerse amigos míos,pero a todos les dije que me gustaba más estar solo.
Me quedaba hasta la hora del cierre de la biblioteca a las 10 de la noche,pasaba todo el día en la universidad estudiando o investigando por mi cuenta con moléculas y átomos,esa era mi verdadera forma de divertirme.

Como vivía en un apartamento a las afueras del campus,regresaba por las calles casi desiertas disfrutando de la tranquilidad de la noche.En uno de aquellos paseos,apenas un par de calles me separaban de mi apartamento,pero un ruido captó mi atención.Sonaba a un animal herido o algo así...Dudé si ir a ver de qué se trataba porque comenzaba a llover,por aquella época del año,siempre empezaba una lluvia suave hasta que la lluvía era torrencial.Seguí el sonido hasta que di con una caja en medio de la calle...


Resultó tratarse de un pequeño gato,abandonado en medio de la calle.Maullaba ya empapado por la lluvia.Sus ojitos fijaron su vista en mi y me maulló también.Miré  al rededor pero no había nadie ni nada que pudiera ocuparse de aquel pequeño animal.
Negué.Yo no podía ocultar mi preocupación,pero tampoco sabía cómo se cuidaba un animal así,di media vuelta y caminé para marchar a casa,pero la lluvia arrecía.Alcé un brazo para cubrirme la cabeza y por primera vez en mi vida,sentí empatía por los maullidos de aquel bebé.Acabé dando media vuelta y corrí de regreso a donde estaba la caja viendo al animalito acurrucado y tiritando de frío.Por un momento lo vi como un alma gemela,solo en todo momento.Lo cogí entre mis brazos y lo pegué contra mi pecho mientras echaba a correr hacia el apartamento.
Era la primera vez en mi vida que sentía empatía por un ser vivo.

Al llegar a casa empapado,me apuré a ir al baño,envolví al gatito en una toalla y yo me desvistí por completo para ponerme ropa seca y evitar enfermar.Luego agarré al animal envuelto en la toalla y lo llevé conmigo al sofá.El gatito había empezado a ronronear y a frotar su carita contra mi y yo ni siquiera sabía lo que eso significaba.Alargué el brazo para coger el ordenador y mientras el animalillo seguía haciendo aquel ruido tan extraño.Busqué todo lo necesario para cuidar a un gato,a primera vista parecía fácil,pero yo no estaba seguro de tener el tiempo suficiente para atenderlo.Me preocupaba ver todas las cosas que tenía que comprarle,un collar con identificación por si se escapaba,un arenero,un rascador ,juguetes...Me hubiera arrepentido en aquel mismo momento de haberle recogido en la calle pero sus ojitos se clavaron en mi como dos alfileres que me enamoraron...De verdad que era el gato más bonito que había visto en mi vida.
De entrada ni siquiera le puse un nombre,encontraba excesiva la idea de tomarme esa libertad,además,no respondía a ninguno de los que intentaba ponerle.Se sentaba lejos de mi y luego empezaba a ronronearme.

Todos los días al salir camino a la universidad,me preocupaba regresar y que hubiera saltado por la ventana y se hubiese matado o escapado o que hubiera roto algo al subirse por los muebles...Y seguía sin tener nombre...


Un día salí hacia la universidad con tantísima prisa,que me dejé dentro de la casa las llaves.
No caí en ese estúpido detalle hasta que no regresé,pues tenía exámenes a lo largo de todo el día e inclusive me olvidé de que mi gato seguramente ya se habría acabado su comida y andaría maullando pidiendo más.

Me busqué  la llave por la chaqueta y los pantalones y maldije al darme cuenta de que no la tenía:

-No puede ser que me la haya dejado dentro...
-Miauu
-¿Ah?-miré hacia la puerta-Gatito...Oh...Tendré que llamar a un cerrajero...
-Miau miau...pruuu~
-No puedo atenderte ahora-saqué mi celular para ver si encontraba por internet a algún cerrajero.
-Miiaauuu
-Sssh...Calla,no puedo entrar porque no tengo las llaves...


Entonces como por arte de magia,la puerta se abrió y me quedé atónito al pasar y ver al gatito colgado del picaporte de la puerta me hizo tener una idea inmediata:

-No sólo eres un gatito bueno,sino que además eres muy inteligente...-lo cogí entre mis manos y le acaricié mientras me ronroneaba-Te voy a llamar Key.¿Te gusta?


Era extraño que me maullase como respuesta...Quiero decir,mi mascota parecía entender todo lo que yo le decía o necesitaba,incluso cuando jugaba con él a pesar de estar inmerso en los estudios,él me entendía.Me sorprendía jugar con él y decirle que me trajese algo de un determinado color y Key lo hacía,generalmente era alguna de las pelotitas que yo le había comprado o algo que pudiera arrastrar con su pequeño cuerpecito.
Cuando ya tenía año y medio,Key se salía de casa por las ventanas y venía hasta la universidad a buscarme.Le dije mil veces que no lo hiciera,alguien podría robarle o un coche podría pasarle por encima...Algo terrible,pero Key no me hacía ni caso y seguía viniendo a buscarme a la hora de salida.Todo el mundo me llamaba "Encantagatos" y eso me molestaba,todos eran muy ignorantes por llamarme así.Personalmente,pienso que mi mascota es más inteligente que ellos.

Con los exámenes finales del segundo año sí que logré estresarme,porque había comenzado a dormir mal,sintiendo que a lo largo de la noche alguien o algo me tocaba...Empecé a creer que estudiar tanto me estaba volviendo loco y que había comenzado a imaginarme cosas...Pero un día me levanté con un pequeño morado en el cuello y entonces me tomé en serio que algo sucedía por las noches.
No creo en fantasmas,pero algo había allí o quizás alguien se colaba en mi apartamento.Se me ocurrió dejar la cámara de fotos sobre la estantería,enfocando la cámara para grabar durante toda la noche,si había algo o alguien,aquello lo iba a grabar.

Me metí en el baño para ducharme y cuando me di cuenta sentí una mirada en mi espalda desnuda.Me giré apurado,pero respiré al ver que se trataba de mi mascota que sentado en medio de la puerta me miraba con atención.Le dediqué una sonrisa:

-Me has asustado,Key,pensé que había alguien mirando.
-Miau~
-¿Quieres bañarte conmigo?...No,qué tontería,si eres un gato,a los gatos no les gusta el agua.


Pero Key parecía dispuesto a no dejar de sorprenderme.El gató caminó hasta la ducha y se metió en ella a mis pies.
Lo miré con sorpresa.Me puse de cuclillas y empezé a mojar al gato que sorprendentemente no huyó despavorido,se dejó empapar bien y también se dejó enjabonar hasta parecer una bola de nieve hecha de espuma.Reí viéndolo y luego me dediqué a enjabonarme ,y me di cuenta que mi mascota me miraba muy fijamente,como si comprendiera lo que estaba haciendo.Por unos momentos pensé que se trataba incluso de una mirada humana y me sentí cohibido de que otro me mirase desnudo...¡Imposible!¡Es sólo mi gato!¡Un gato!No puede entender lo que hago por muy inteligente que sea.
Nos enjuagué a ambos y luego lo sequé con una toalla pequeña antes de secarme yo mismo.

Un pijama y a la cama.Me acosté y me dispuse a dormir,sabiendo que en ésta ocasión si pasaba algo,por la mañana lo iba a descubrir.Key saltó a mi lado en la cama y se acurrucó en la almohada junto a mi cabeza para dormir.Solía ronronear hasta que yo me quedara dormido y era extraño,era como el arrumaco de mi madre cuando yo era más pequeño.
Finalmente me quedé dormido e inconscientemente,volví a sentir que allí había alguien más y que no paraba de tocarme y darme besos.
Un escalofrío me recorrió la espalda y me desperté de golpe en medio de la noche,el sudor caía por mi frente y me sentí mareado,hasta que me di cuenta de que entre mis piernas se alzaba algo...Aquella incómoda erección que en otras ocasiones también me había causado molestías...Las hormonas en esa etapa eran difícilmente controlables...Quizás era eso,que mis hormonas me jugaban una mala pasada y me hacían creer que allí había alguien...Pero es que me di cuenta de que en verdad había alguien...Me sentía apretado contra la pared,miré el bulto a mi lado y alcé de golpe la manta.

-¡Oh,joder!-me levanté de golpe-¿¡Quién eres!?¿Qué haces en mi casa?


Ese desconocido ni siquiera me respondió alzó la cabeza y me fijé que en su cuello estaba el collar de mi gato.No...aquello se estaba volviendo una gilipolles,yo aún estaba durmiendo,no había lógica por ninguna parte.

-¿Y mi gato?¿Qué le has...?


El joven se levantó el fleco para que pudiera verle los ojos...Era imposible...pero ese chico era mi gato.Mi pulso se disparó y barajé 3 opciones:
1º Yo estaba drogado
2º Yo estaba soñando
3º Yo acabo de hacer un descubrimiento que me hará famoso

Sacudí la cabeza,volví a la cama y le abrí la boca con los dedos fijándome en sus finos colmillos blancos,en las uñas afiladas de sus manos.Realmente era una versión humana de mi mascota...Pero era imposible...¿no?

-¿Key?
-Pruuu...-se incorpora y queda sentado en la cama-Miaauu...Appa Jong~
-¿Eh?¿¡Sabes hablar!?¿Cómo es posible que tengas esa forma humana?Tu eres un gato y...Los estudios me han sentado mal,yo estoy flipando...Esto no es verdad,estoy soñando...
-¿?...


A pesar de llevar ya casi dos años conmigo,parecía que le costaba desenvolverse con palabras.Me senté a su lado intentando razonar la situación,pero no lograba comprender cómo era posible que mi gato tuviera forma humana.Él me abrazó con fuerza y empezó a rerstregarse conmigo mientras ronroneaba.Reparé en que estaba desnudo...¿¡un chico desnudo dentro de mi casa;de mi cama!?Lo separé de golpe:


-¡Esto no está bien!-lo aparté y reparé en que entre mis piernas seguía aquella erección tan molesta...
-Miauu~ pruuu~ -se me sentó encima.
-Oh Dios...-tragué saliva mientras le miraba a los ojos.
-Quiero a appa Jong-me abrazó y comenzó a llenarme de besos.
-¡Para,eres un animal es imposible que ésto esté pasando!


Key me silenció con sus labios y me quedé petrificado...Lo atraje contra mi cuerpo y empecé a besarle,igual que había visto ya en cientos de estúpidas películas,igual le besaba yo,en los lóbulos de sus orejas,el cuello,la nuca,los hombros.Sentía su piel temblar bajo mis labios,escuchaba su voz aguda maullar con suavidad y ronronearme...Empecé a hacer círculos sobre su piel con los dedos.Tragué saliva y comencé a rozar mi entrepierna entre sus nalgas...Oh..:Dios...¿De verdad que voy a hacerle eso a mi gato?¿Tan asquerosamente desesperado estoy?...Solo estoy soñándo,sí,eso es,un simple sueño,lo más probable es que esté acostado sobre la cama cascándome la polla, así que me dejé llevar.
Él era en sí mismo perfecto y mi erección era cada vez más latente y conforme notaba que se me ponía más dura,lo pegaba más contra mi...Nunca pensé que mi mente pudiera hacer algo tan hermoso como crear a aquel chico gato...Me saqué la erección de los pantalones con mano temblorosa...Sí,yo era principiante en ésto,pero igualmente no pensaba pararme a pensar si lo que estaba haciendo estaba o no bien ejecutado.Mi polla ahora mismo solo tenía un camino a seguir y era justo el que estaba entre sus nalgas,aquella entrada que durante muchas noches había deseado tocar y poder explorar. Moví mi cadera y gracias a que mi polla estaba ya lubricada con el líquido preseminal,me fue mucho más fácil deslizarme dentro de su cuerpo.Él arqueó la espalda y gimió mientras intentaba establecer un punto de apoyo en la cabecera de la cama con una mano, al tiempo que se sujetaba de mi nuca.Gemí de gusto...No sabía que se pudiera sentir tan bien y tan apretado en un agujero corporal que no tenía mayor fin que el de expulsar lo que le cuerpo no necesitaba...Por todos los demonios,que gusto,que bien me siento así apretado y no solo palpita mi polla,siento como sus paredes también palpitan y se contraen.Comienzo a moverme lento dentro y fuera y escucho como mi mascota gime por ello y al mismo tiempo se queja diciendo que lo hago demasiado fuerte.¿Realmente lo hago tan fuerte?Resoplé y le miré de manera traviesa...Lo sujeté bien de la cintura y comencé a arremeter con fuerza y ya no solo se escuchaba el ruido del somier de la cama y nuestros gemidos, sino que se le sumaron el sonido de la fricción y el del choque de nuestros cuerpos.
Podría jurar que había nacido esplícitamente para encajar a la perfección con él.Me afané en metérsela más,meterle todo lo que cupiese,no quería ver nada de mi hombría fuera de su cuerpo.Le hice pegar su pecho contra el mío y jugueteé a morder su cuello mientras mis manos retorcían sus pezones ya erizados por la excitación.Se acostumbró deprisa a la intromisión de mi cuerpo en el suyo,pues pronto sus caderas empezaron a chocar contra las mías y ni él mismo se creía que estuviera disfrutando conmigo así,ni que yo me hubiera atrevido a hacerle lo que le hacía y más aún a tocar su entrepierna como otra parte más de un tesoro que solo podía ser mío...Key me arañaba la espalda y los hombros,sus gemidos felinos,sus caras...Aquellas caras que yo nunca había visto ni en mis mejores sueños...Finalmente me corrí dentro de él y una idea graciosa me cruzó por la mente¿ahora tendríamos bebés medio gatos?

Me dejé caer sobre la cama y Key aún seguía sentado encima de mi,maullando de forma jadeante,quizás fascinado o eso me pareció leer en su rostro.Quizás me equivoqué...Me empezó a dar sueño y me quedé mirándolo apenas unos minutos hasta que me quedé dormido...

Por la mañana me costó despegarme de la cama y cuando recordé lo sucedido creí que se había tratado de un estúpido sueño que me habría costado las sábanas...Busqué a Key por la habitación pero no le vi:


-Key,ven gatito¿dónde estás?
-Pruu~
-¿?


Miré hacia la puerta y me quedé de piedra.Entró con aquella forma humana que pensé que sólo había sido parte de un sueño caliente.Lo miré de arriba a abajo.Estaba desnudo y le costaba caminar...

-¡Imposible!¡Me he acostado con mi gato!-me levanté de golpe viendo que tenía los pantalones bajados-Oh,joder...


Él se sentó en la cama ronroneando y yo agarré la cámara que había puesto a grabar durante la noche.A pesar de la falta de iluminación,sí que se apreciaban nuestras siluetas encima de la cama y era inconfundible cuando vi que sí que había tenido sexo con mi mascota.

-Oh...Mierda...Pero es imposible que nos hayamos acostado...eres un gato...¿no?
-Miau~
-Ayh...Yo no estoy bien de la cabeza-me senté en el borde de la cama.


Tenía dos opciones:
 1º Dar a conocer lo que acababa de descubrir,un gato que se transforma misteriosamente en humano.
2º Callarme y ver hasta donde era capaz de llevarme mi depravación...

Hiciera una u otra iba a quedar siempre como un loco.En la primera,un loco a los ojos del mundo; en la segunda,un loco para mi mismo...
¿Qué debía hacer?
Giré la cabeza para ver a Key y él me dedicó una gran sonrisa.

-...¿Quiere jugar el gatito?


( ̲̅:̲̅:̲̅:̲̅[̲̅ ̲̅]̲̅:̲̅:̲̅:̲̅ )FIN( ̲̅:̲̅:̲̅:̲̅[̲̅ ̲̅]̲̅:̲̅:̲̅:̲̅ )