Género: Aventura,fantasía,yaoi
EEL: TP
Resumen:El mundo es gobernado por diferentes pueblos cuyas cibilaciones están fundadas sobre descomunales minas de piedras preciosas.Sus gentes tratan con dragones que parecen hechos de las mismas gemas.Pero el pueblo del oro ha extinguido ya a muchos dragones y su siguiente objetivo son los dragones negros.Una raza escasa y esquiva que conserva intactos todos sus tesoros.
Minho logró llegar de regreso al Bosque de Esmeraldas,sano y salvo.En cuanto bajó de su dragón mandó venir a los mejores doctores para que se ocupasen del Rey Dorado.
Mientras el joven rey llevaba en brazos a Jonghyun,escuchó que sus hombres le vitoreaban como un héroe de guerra y no había sido menos,salvando la vida del dorado,conseguiría evitar una guerra.
Los doctores se ocuparon del rey mientras un emisario salía con rumbo a la Ciudad de Oro para pedir al Dragón Real y a los consejeros,que viniesen al Bosque Esmeralda para custodiar a Jonghyun de regreso a su hogar en los desiertos.
El propio Rey de las Hojas tuvo que ser atendido de urgencia por un corte que tenía en el brazo y que según sus curanderos,era una herida provocada por un animal venenoso,así que una vez vendado,quiso echarse a dormir,estaba agotado,por culpa de aquel inconsciente de Jonghyun,había tenido que enfrentarse a una de las peores situaciones que se le podían presentar a un rey.Elegir entre salvar a un tirano y evitar una guerra o abandonarlo a su suerte y ver morir a las gentes de su pueblo ante hordas de Soldados Dorados,descontrolados y sedientos de sangre.
Una vez se dejó caer en la cama,pensó que iba a lograr dormir un poco,pero pronto sus consejeros llamaron a la puerta,era necesaria una reunión urgente con respecto al tema del rescate del Rey Jonghyun.
-Señores¿no puede ser en otro momento?Preciso de descanso-dice hastiado mientras se dirige tras ellos a la sala del trono.
-Su Majestad debe comprender la magnitud de lo sucedido-dice uno de los ancianos.
-Si lo comprendo muy bien,pero yo solo quiero descansar.
A pesar de ser considerado un rey sensato a ojos de su pueblo,los Consejeros de la Esmeralda siempre recalcaban su juventud e inexperiencia, y él,como joven que era,tenía que mostrar respeto por aquellos ancianos que en su mayoría,superaban el siglo de edad.
No dijeron nada nuevo para él en aquella reunión,el hecho de que Jonghyun estuviera herido podía significar una guerra,aquel inestable gobernador,podía volverse en contra de sus salvadores sin motivo alguno.Aquello era cierto.Jonghyun con apenas 14 años,dirigió al ejército de la Ciudad de Oro a destruir el Río de Plata¿el motivo?Evitar un futuro enlace con la hija de los Reyes Plateados Chae Lin...El final de la princesa fue motivo de muchos rumores.Algunos,aseguraban que una vez muertos sus padres,ella rogó clemencia al joven Jonghyun y que éste la arrojó a sus soldados permitiendo que ellos la violaran y después,finalmente acabó con su vida; otros cuentan que la ahogó con sus propias manos en el río de plata y unos pocos que tras mandar a sus hombres clavar estacas de madera al pie de la torre,fue arrojada a la muerte desde la última estancia.
Si Jong había hecho aquello simplemente por evitar una boda¿qué no sería capaz de hacer por echar a alguien la culpa de su mala suerte?Quiso pensar que no sería capaz de hacerlo después de haberse tenido él el trabajo de ir a buscarlo a un lugar tan insondable como era el Bosque Inferior,abandonado desde hacía milenios por las gentes de la Ciudad Esmeralda.
Los ancianos siguieron discutiendo los unos con los otros y debatiendo las posibles ventajas o repercusiones que tendría aquello,sin darse cuenta de que su rey,se había quedado dormido sentado en el trono y hasta que uno de sus ronquidos no llamó la atención del consejo,nadie se había percatado.Lo consideraron una falta de respeto,pero algunos que eran muy buenos amigos de Minho,lo defendieron,era joven y había vivido una aventura muy peligrosa y salido milagrosamente ilesio,merecía tiempo para descansar.Sin embargo nadie se atrevió a moverlo para llevarlo a su habitación,por si enfada al despertar de forma súbita;así que lo dejaron durmiendo en su trono.
Cuando Minho logró despertar,aún aturdido de cansancio,uno de sus soldados se encontraba a su lado diciéndole por milésima vez que había llegado los consejeros del Rey Jonghyun,su Dragón Real y el Príncipe Taemin.
Al Rey de las Esmeraldas le faltó tiempo para ponerse en pie.Con todo aquel alboroto,había olvidado por completo que Taemin se estaba ocupando sólo de las diplomacias con aquel pueblo tan terrible y seguramente su falta de determinación,le había hecho pasarlo mal ante aquellos hombres acostumbrados a ser dirigidos por el látigo de un gobernante de corazón duro como la piedra.El primero en pasar a la sala del Trono Esmeralda fue el prometido del Rey,no parecía feliz,ni descansado,tenía ojeras,mala cara y por si fuese poco venía deshidratado y con el ceño fruncido.Cuando Minho quiso acercarse para recibirle entre besos y abrazos,Taemin le esquivó y siguió de largo,salió por una de las puertas traseras de la sala,para ir en busca de su dragón.
-¿Tae?¡Eh,Taemin espe...!
-Rey de las Esmeraldas-dijo uno de los consejeros dorados evitando así que Minho fuese tras el heredero del Reino de los Zafiros.
-Mierda...-susurra y se gira-Bienvenidos,señores del Reino Dorado-se acerca a darle la mano al más anciano pero frunce el ceño al ver que el hombre no le corresponde el saludo.
-¿Y nuestro Rey?
-Está sano y salvo,descansando en uno de mis aposentos-dice con enojo y se retira para sentarse en su trono.
-Exigimos que nos deje verlo inmediatamente.
-No están en derecho de exigir nada,están en MÍ reino y aquí la máxima autoridad soy yo-dice secamente.
-...
-Sin embargo el Dragón Real de Jonghyun sí que puede verlo,puesto que él tiene más autoridad que ustedes,señores del consejo.
-¡Eso es una ofensa muchacho!
-REY-le corrige-No soy un cualquiera,¿o es que acaso sus ojos llenos de cataratas no le permiten ver la corona en mi cabeza?-se levanta del trono y sin hacer caso de las voces que comenzaron a dar aquellos ofendidos ancianos,salió a una de las largas galerías que daban al exterior del palacio.
Llamó al dragón de Jonghyun y le pidió que le siguiese a ver al Rey Dorado.Aquella bestia,mucho más educada y agradecida que los hombres que habían venido en representación del Reino de los Desiertos,lo siguió curioso por las galerías hasta ver que se detenía ante una puerta,Minho abrió y le ofreció pasar.El gigantesco reptil,apenas metió la cabeza en la habitación,vio a su amo acostado en la cama y le faltó tiempo para rugir de júbilo al ver que se encontraba a salvo.
Jonghyun dio un respingo en la cama ante el inconfundible sonido de su dragón y al abrir los ojos y encontrarse de frente con una lengua,caliente,rasposa y pegajosa,emitió un quejido y trató de separar de sí a su dragón a manotazos.Nunca le había gustado que le llenase de babas.
Luego de unos segundos,sonrió al ver que su dragón estaba ileso y le acarició el hocico.
-Me alegra ver que ya te encuentras mejor,Jong.
-¿?¡Ah,Minho!Ya decía que todo era muy verde para mi gusto.
-Has venido tus consejeros a buscarte.
-¿En serio?¿Dónde están?
-En la sala del Trono Esmeralda.
-¿De verdad?-se levanta y se estira-En ese caso vamos,imagino que estarán deseosos de ver a su Rey.
-Me han estado faltando al respeto.
-¿De veras?Bueno,supongo que tendré que ocuparme de ello-se acerca al Rey de las Hojas-Te debo la vida,Minho,es contradictorio,pero es así.Llévame a la sala.
Minho guió a Jonghyun y a su dragón de regreso a la sala del Trono Esmeralda y allí,incrédulos,todos los consejeros vieron entrar a su Rey.Llevaba la ropa raída y sucia,pero aún se apreciaba el dorado.No llevaba su corona ni tampoco su espada,pero se veía soberbio y severo:
-¡De rodillas!-brama al ver que se quedan petrificados-¿¡Habéis olvidado cómo tratar a vuestro Rey!?-todos los consejeros se arrodillaron rápidamente mientras las fuertes pisadas de Jonghyun avanzaban hacia ellos-¿Quién de vosotros ha faltado el respeto a éste hombre?-señala a Minho-¿¡QUIÉN!?
-He sido yo su Majestad,Rey de Oro-dijo el más anciano.
-¡En pie Consejero Cho!-cuando el anciano obedece,Jong lo manda de un puñetazo al suelo.
El Rey de las Esmeraldas abrió mucho los ojos ante aquella escena.Cierto que el Consejo entero estaba obligado a tener siempre en cuenta al Rey y respetarlo,pero así mismo,ningún gobernante podía faltar al respeto a aquellos hombres,ni mucho menos ponerles las manos encima...Pero Jonghyun rompía todas las normas,su conducta era en sí una llama que quemaba todas las leyes a su paso.No quiso intervenir y ninguno de los consejeros dijo nada:
-Éste hombre,éste Rey me ha salvado la vida-dijo con voz ronca Jonghyun-¿lo han entendido?Ha salvado MÍ vida,eso lo convierte en alguien intocable y que merece nuestro respeto.Consejero Cho,en pie y pida perdón al Rey de las Esmeraldas.
-Le ruego humildemente que perdone mi comportamiento Rey de las Esmeraldas-dijo el anciano tras ponerse en pie con ayuda de su bastón dorado.
-Le perdono señor Consejero...-mira incrédulo a Jonghyun.
-Y una vez aclarado eso...tengo hambre-se acerca a Minho-¿Me ofreces algo de comer?
-Naturalmente,pide al cocinero lo que desees-llama a un criado-Sirvan al Rey Jonghyun todo lo que pida.
-Quiero jabalí,quiero cerdo,costillas de cerdo...
-¿?J-Jonghyun-carraspea Minho.
-¿Qué?
-Aquí no tenemos carne,comemos sólo verduras.
-¿Qué?¿Verdu...qué?-frunce el ceño-Malditos comeplantas algo de carne tiene que haber.
-No...Aquí no matamos a los animales.
-...Me voy a mi reino,si no como algo pronto me voy a desmayar-dice con mala cara.
-¿Estás en condiciones de viajar?
-Sí,sí,sí,aquí no me quedo a comer gusanos.
-En ese caso espero que tengas un buen viaje de regreso a tu hogar.
-Sí...tendré que comer mucho antes de volver a salir a buscar a Key...-aprieta los puños.
-¿No te estarás sobreesforzando?
-No...Tú harías lo mismo si estuvieras enamorado-le abraza-En compensación a tu ayuda,ningún dragón dorado sobrevolará tu bosque sin pedirte antes permiso,ni se acercarán a tu ciudad.
-¿Eh?Oh,Jong,eso es...
-No digas nada,me has salvado la vida y no es algo de lo que nadie más en éstas tierras pueda presumir.Hasta pronto.
Minho despidió al Rey Dorado y a todo su séquito de consejeros y soldados alados viendo como echaban a volar sobre las hojas del Árbol Madre del Reino Esmeralda y marchaban lejos para no regresar.De pronto sintió un gran alivio,como si algo que llevaba a la espalda se hubiese soltado.Sonrió satisfecho.Había hecho lo mejor para su pueblo y eso era una gran recompensa.
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Key se movió lentamente,tratando de desperezarse.En aquel lugar era difícil distinguir el día de la noche,pues el cielo siempre estaba cubierto de nubes de aspecto ponzoñoso que dejaban precipitaciones de ácido por toda la extensión de los pantanos.
Al abrir los ojos se percató de que estaba abrazado al cuerpo de un hombre...Sus ojos recorrieron aquel torso desnudo hasta alcanzar el rostro y reconocer a Onew...En los días que llevaba allí,sin saber bien si preso o como huésped en un palacio sin habitaciones; había intimado mucho con aquel hombre-dragón...Incluso estaba seguro de que se había enamorado de él sin saberlo y la prueba era aquella,que dormían juntos desde hacía varias noches y cada vez más pegados.
Impulsivamente se incorporó y beso lentamente al Rey Dragón.Lo sintió resoplar contra sus labios y al poco su beso fue correspondido...Finalmente cuando lo ojos del moreno,se abrieron y le observaron,Key se retiró apresurado y se cubrió los labios.
El Rey Dragón se incorporó lentamente y bostezó mientras estiraba sus brazos haciendo crujir los huesos al recolocarse.
-Veo que ya te vas habituando a estar aquí.
-Bueno...Lo cierto es que extraño darme un buen baño...
-Idiota...-ríe el moreno antes de incorporarse-Acompáñame,al fondo de la cueva hay unas termas y si no me equivoco a ti te gusta el agua muy caliente¿cierto?
-S-sí-se sonroja y baja un poco la cabeza-Escucha,Onew,gracias por traerme aquí,realmente es extraño que no me traten como a un objeto.
-Lo extraño debería ser justo al revés¿qué clase de hombre decente hace lo que te han hecho a ti?-camina por las interminables galerías de la cueva junto a Key-Escucha,si quisieras,te dejaría llevarte todos los rubíes de nuestros tesoros,creo que hay suficientes para levantar una pequeña ciudad de nuevo.
-¿Qué?...-niega apesadumbrado-Soy el único superviviente del Reino de los Rubíes...¿levanto una ciudad para mi solo?
-¿Y por qué no alumbras hijos para ese reino?
-¿¡Qué!?-retrocede de golpe.
Onew miró fijamente aquel ceño fruncido y sus ojos de enfado,era como enfrentarse a un gato que se siente acorralado y en peligro.El Rey Dragón ni siquiera se ofendió por aquella posición de defensa.Entendía perfectamente que debido a su juventud,el Príncipe Key no deseara tener hijos ni verse obligado a tenerlos.Pero pronto la duda nubló los ojos de aquel joven sin reino y un torbellino de emociones recorrió su cuerpo.
Vio que el Rey Dragón siguió avanzando por los túneles y varios pasos más atrás lo siguió él.No quería tener hijos,ni ahora ni nunca,pero si lo pensaba como heredero de los Volcanes de Rubí,era su deber moral,no,su obligación,lograr concebir hijos que perpetuasen no sólo una larga estirpe de sangre noble que provenía desde el inicio de los tiempos,sino además que fueran guerreros dispuestos a luchar por volver a levantar un imperio en ruinas.
El dragón negro no era ajeno a aquellos pensamientos de deber que ahora formaban un turbio remolino en la mente de Key,pero no intervino en ningún momento.Lo condujo hasta las aguas termales y una vez allí,le dijo que se tomara su tiempo.
-No creo que sepa regresar cuando haya acabado-susurró Key.
-Dejaré marcas para que vayáis por el camino correcto,descuida,Príncipe Key.
-Onew...de verdad,gracias por todo...
-No merezco que me agradezcas nada-le sonríe un poco y se retira cuando ve que comienza a desnudarse.
El rubio entró en aquellas aguas que hervían desprendiendo una nube agradable de vapor y respiró sintiéndose en el lugar más parecido a su hogar que ahora quedaba en la tierra.Miró su ropa sucia y decidió meterla en el agua para poder lavarla y que quedase al menos lo más limpia posible.No recordaba haber lavado nunca nada,pero ya no había criados que lo hicieran por él.
La tristeza le invadió de pronto y se cubrió la cara con ambas manos para dar rienda suelta a su dolor.Lloró durante varios minutos y soltó mil maldiciones contra el Rey de Oro y su avaricioso corazón.Se limpió las lágrimas y se dijo a sí mismo,que si existían aún más hombres del Reino de los Rubíes,él los encontraría y buscarían la forma de volver a alzar su ciudad y finalmente él debería de alumbrar nuevos herederos para esa ciudad...Pero él no quería dejarse embarazar por cualquier hombre y mucho menos por Jonghyun que era el causante de todas sus desgracias.
Tras varias horas en el agua,meditando todo lo que debía o no hacer,salió y se colocó su ropa que aún mojada,se notaba muy caliente.Al salir a las galerías,sonrió tontamente al ver que el camino de regreso estaba marcado con rubíes.Aunque Onew le había dicho que podía cogerlos todos,no se agachó a recoger ninguno.Tras unos minutos caminando,regresó a aquella gran sala y se encontró con algo que no esperaba.Uno de aquellos dragones negros estaba preparando un buen nido entre las gemas,mientras otro dragón mantenía el huevo caliente con el vapor de su aliento.Entonces entre aquellos ejemplares había hembras...Se sintió culpable de haber creído todas aquellas mentiras de que esos dragones eran criaturas despiadadas...No lo eran,eran animales salvajes que se habían visto perseguidos y aniquilados por los hombres desde que el mundo era mundo¿No comenzaron así los Pueblos de las Piedras Preciosas?Aniquilando y esclavizando a los dragones que posteriormente se convertirían en máquinas de guerra y en los amigos más leales para sus jinetes.¿Por qué los dragones?Porque los hombres descubrieron que aquellas criaturas guardaban tesoros en sus cuevas,grandes tesoros,gigantescas cantidades de oro,rubíes y demás gemas que más tarde dieron nombre a los pueblos...Los dragones negros,simplemente habían incrementado su tamaño para protegerse de la amenaza humana y se defendían del mismo modo en que eran atacados,sin piedad.
Visualizó a Onew en lo alto de aquella montaña de gemas,inmerso en sus pensamientos mientras esculpía con sus poderosas uñas una figurita en alguna gema.
Quizás,de todos los reyes que había sobre la tierra,Onew,fuese el más valiente.Key supo de la propia boca del moreno,que al ver que sus dragones eran alarmantemente pocos,les ordenó no salir de los terrenos del pantano y él mismo volaba a los reinos en busca de grandes piezas de comida a riesgo de su propia vida,pues alimentar a todos sus dragones no se lograba con una única pieza de caza,daba igual que fuera una ballena de los Mares de Zafiro,apenas si daba para comer a tres de los suyos.
-Onew...
-¿?Hola,Key-le sonríe un poco-Anda,sube.
-¿Qué estás haciendo?-escala por entre las gemas hasta donde se encuentra el Rey Dragón.
-Tallaba un juguete,he visto ha hombres humanos hacerlo en madera para sus hijos,quizás haciendo uno para el nuevo dragón que viene,todo vaya mejor.
-¿A qué te refieres?-se sienta a su lado.
-Sólo tenemos dos dragonas aquí,una ya tiene casi 600 años y no puede poner más huevos de dragón y por desgracia,la otra hembra no ha tenido suerte,ninguna cría ha llegado a nacer.
-¿Por qué no?Eso es terrible...
-Por el aire de la ciénaga...Llevamos viviendo aquí desde hace hace muchos eones,casi tantos como la tierra tiene de antiguedad...El aire de las pozas es venenoso y las generaciones que han ido naciendo poco a poco se han envenenado con él y ha llegado un momento en el que la reproducción es imposible-suspira.
-¿Y por qué no les sacas de aquí?Eres su Rey,llévalos a un sitio más seguro.
-¿Cómo?-le mira frunciendo el ceño-¿Pasando sobre los Bosques Verdes bajo una lluvia de flechas de esmeralda?¿O por encima de los desiertos y sus disparos de lanzas y rocas ardientes?No...No es seguro sacarlos de aquí,es algo que ya me he planteado pero...es imposible...
-Joder...-se abraza a la cintura de Onew de forma impulsiva-Ojalá pudiese ayudarte...
-¿?-le mira y pasa un brazo sobre sus hombros-Imagino que no querrás vivir siempre en una cueva,cuando quieras marcharte,solo dímelo.
-No quiero irme de tu lado-susurra avergonzado-Yo...siento...empiezo a sentir que...
-No sigas...-le aparta despacio-Key es imposible,tarde o temprano me matarán¿y qué será de ti?
-¡Sé defenderme!¿Y si huímos juntos más allá de los océanos de hielo?Donde jamás se han aventurado los hombres?
-Es demasiado peligroso,Key,moriríamos congelados...
-...
El Príncipe de los Rubíes se aparta del Rey Dragón y le mira con el ceño fruncido.Ojalá supiese qué hacer por él y sus dragones,pero por el momento todo parecía imposible.
Se acercó a la entrada de la cueva para poder observar la ciénaga y cogió aire sintiendo un escalofrío subir por su espalda,como un presentimiento que le avisaba de que lo peor estaba por llegar...y si llegaba...seguro lo haría a lomos de un dragón dorado...
◕♘CONTINUARÁ◕♘
